La complejidad de la delantera para un canterano

Raúl García de Haro será, con casi total seguridad, jugador del primer equipo a todos los efectos. El catalán logrará así la ansiada oportunidad por la que lleva tantos años peleando. Una posibilidad que se ha ganado por méritos propios, después de convertirse en una de las sensaciones del pasado curso en Segunda División. El ariete tiene condiciones de sobra para triunfar en la élite y buscará romper las dificultades que siempre han tenido los canteranos para asentarse en la lanza de ataque del Real Betis.

De sobra conocida es la habilidad del club para sacar talentos, siendo una de las mejores canteras de Europa. En los últimos años ha promocionado valores de la talla de Dani Ceballos, Fabián, Junior Firpo, Edgar, Rodri Sánchez o Juan Miranda, entre otros, pero pocos han sido los delanteros, a excepción de Loren Morón, que han logrado cierta continuidad en la última década.

Los últimos delanteros canteranos del Betis

El único que lo ha conseguido en los últimos años ha sido el citado Loren Morón. El marbellí irrumpió en el primer equipo con una fuerza tremenda, siete goles en 15 partidos que fueron decisivos para que el Betis regresase a Europa un lustro después. De la mano de Quique Setién disfrutó de sus mayores tardes de gloria en Heliópolis, pero el paso de los años y la falta de confianza de los nuevos entrenadores le dejaron sin sitio. Este verano se ha desvinculado del club después de 131 encuentros con la elástica verdiblanca.

Desde que lo lograse Dani Martín Alexandre, pocos más lo han hecho. Su buen hacer en el Numancia le valió a Álex Alegría para quedarse en la 16/17. A las órdenes de Gustavo Poyet disputó 27 partidos, en los que logró tres tantos.

Hasta en cinco equipos distintos tuvo que brillar Sergio León para ganarse su regreso al Real Betis (no promocionó directamente del filial al primer equipo). El canterano jugó dos años en el Real Betis, siendo especialmente importante en la 17/18, con 13 goles, pero perdió protagonismo y tuvo que salir.

Ahora es Raúl García de Haro el que busca recoger el testigo y asentarse en una de las posiciones más difíciles históricamente para los canteranos. Calidad y argumentos tiene de sobra como para dar un paso al frente. Llega con el aval de ser el máximo artillero nacional de Segunda. Hay ganas de verlo.