Bale desafía al Real Madrid: "Si tengo que jugar al golf, juego"
El atacante galés del Real Madrid, Gareth Bale, ha podido pisar por última vez el Santiago Bernabéu como futbolista blanco ante el Real Betis. Un encuentro que presenció en su totalidad sentado en el banquillo sin ni siquiera calentar.
Una imagen que ha servido para que el futbolista terminase cabreado por no poder despedirse como quería de la afición y se desahogase en el vestuario, tal y como ha desvelado Fernando Burgos en el programa 'Radioestadio' de Onda Cero.
"Tengo tres años de contrato. Si quieren que me vayan que me paguen 17 millones netos por temporada. Y si no, aquí me quedo. Y si tengo que jugar al gol, juego", afirmaba el galés tras el choque.
Bale cuenta con contrato en vigor con la entidad madridista hasta el 30 de junio de 2022, fecha hasta la que espera llegar el propio jugador a pesar de que la situación actual con la afición no es la mejor posible. Su mala imagen en los últimos encuentros han desencadenado una gran cantidad de críticas por parte de los aficionados blancos.
Desde el regreso de Zinedine Zidane al banquillo, el '11' blanco ha sido relegado al banquillo y ha perdido el protagonismo con el que esperaba contar. Prueba de lo que podría avecinarse la próxima temporada en el caso de que finalmente el propio jugador decida quedarse en el Bernabéu.
Para no hablar castellano cómo se dijo no está nada mal la frase