Sergio Ramos tapa una rebelión en el Real Madrid contra un peso muy pesado
-
El último escándalo que persigue a Sergio Ramos en el Real Madrid
-
Isco monta el show: la última bronca que Sergio Ramos no sabe cómo tapar
-
Sergio Ramos tira de la manta. "Hay oferta por Bale" (y no es China, ni la Premier)
Punto y final. El Real Madrid bajó la persiana de su pretemporada este domingo contra la Roma. Los italianos se llevaron el choque disputado en el Olímpico de la capital italiana en la tanda de penaltis (7-6), después de que el partido terminara con empate a dos goles.
Marcelo (16’) y Casemiro (39’) pusieron los goles para los de Zidane, pero Perotti (34’) y Dzeko (40’) igualaron la contienda en ambas ocasiones.
Con el tanto del lateral parecía que las cosas empezaban a carburar en el Madrid después de una pretemporada que ha dejado muchas dudas. Pero nada más lejos de la realidad. De hecho, el gol de Casemiro lo empataron tan solo un minuto después. Y las dudas no solo no se disiparon. Crecieron en gran medida. Y es que este Madrid tiene carencias en casi todas sus líneas.
Pólvora mojada
Los delanteros no aciertan. Zidane terminó el encuentro con hasta cuatro delanteros. Intentó llevarse la victoria con Bale, Benzema, Jovic y Vinícius en el campo. Pero ninguno de ellos fue capaz de anotar el tercero.
Y mientras tanto, la defensa volvió a hacer aguas. Debutó Eder Militao, pero si aportación no mejoró lo visto hasta la fecha. Y así cerró el Madrid la pretemporada con 18 goles en contra en siete partidos y son solo dos victorias. Una de ellas en la tanda de penaltis.
De puertas para afuera tanto el míster, como los jugadores y la directiva se muestran tranquilos. Apuntan que es la pretemporada y que cuando empiece el curso de verdad las cosas serán diferentes. Pero de puertas para dentro el nerviosismo crece sin cesar. Y cada vez son más los que señalan a un mismo responsable: Zidane.
Zidane no encuentr ala tecla
En el vestuario cada vez son más los que dudan de las capacidades del galo. Este domingo volvió a probar varios sistemas, pero con ninguno fue capaz de tocar la tecla. Que si 3-5-2, que si 5-3-2, que si 4-4-2… Pero nada de nada. Los blancos volvieron a ser estériles ante los italianos.
Un panorama que tiene a los pesos pesados opinando que lo que Zidane ganó en su primera etapa no fue más que suerte y el tener en el equipo a un jugador decisivo como Cristiano Ronaldo, no por sus virtudes como técnico.
De momento solo ha sido la pretemporada, pero más vale que se ponga las pilas el míster si no quiere seguir perdiendo el crédito ganado en su primer proyecto en el Santiago Bernabéu y que ya ha empezado a bajar entre los pesos pesados.