La inesperada y valiente apuesta de Zidane para relevar a Marcelo
Miguel Gutiérrez (Madrid, 2001) fue el primer canterano nacido en el Siglo XXI en debutar con el Real Madrid, en la Audi Cup frente al Fenerbahce en todo un Allianz Stadium, un 31 de julio que nunca olvidará. Capitán del Juvenil A y habitual en las inferiores de España, Zinedine Zidane le ha reclutado para la ‘minipretemporada’ del primer equipo.
Sus comienzos fueron en el equipo del barrio en que nació, en Pinto, y lo hizo jugando al fútbol sala en un pabellón cubierto en el que tenían que regatear sillas y mesas como si fueran rivales. En 2006 fichó por el Getafe, donde permaneció cinco años formándose como futbolista ya sobre césped hasta que su evolución llamó la atención del Real Madrid y lo incorporó para el Alevín B.
Le costó adaptarse en los dos primeros años, pero a partir de las categorías infantiles comenzó a crecer y empezó a quemar etapas. Seis meses en el Juvenil B y José María Gutiérrez apostó por el para el ‘A’, donde se ha quedado hasta esta temporada llegando a ser el capitán del equipo.
El 31 de julio, cuatro días después de proclamarse campeón de Europa Sub-19 con la selección española, por la que ha pasado también por la Sub-16 y Sub-17, cumplió su sueño debutando con el primer equipo y poniendo las bases de la promesa que le hizo a su abuelo cuando éste falleció hace dos años.
Ambos estaban muy unidos y cuando su abuelo murió, Gutiérrez transformó el dolor en motivación y prometió que triunfaría en el Real Madrid, como tantas veces soñó su abuelo. Su entorno destaca de él la madurez y la sencillez. Estudiante de ciencias de la actividad física y del deporte, sin tatuajes ni piercings, apuesta por la comida sana y por refugiarse en la familia.
Tras recibir la llamada de Zidane para incorporarse a los entrenamientos de la primera plantilla, volvió a acudir a la Ciudad Deportiva de Valdebebas con el Kia Sportage de su padre y al volver a casa cuenta, entre risas, lo bien rodeado que estuvo entre coches de alta gama.
La confianza del técnico francés no le pilló de sorpresa, ya que éste ha demostrado que le tiene muy presente en sus planes y le transmite seguridad y confianza de cara al futuro. Igual que el club, ya que renovó recientemente hasta 2024 con la idea de que cuente con minutos en Primera División la próxima temporada y seguir creciendo. En el Real Madrid o cedido.
Pero se centra en el presente y en la oportunidad que tiene por delante en esta ‘minipretemporada’ tras dos meses de parón debido al coronavirus. Zidane le llamó porque confía en él y porque, con el tiempo de inactividad y la carga de partidos, quiere tener listo a un futbolista que le de oxígeno a Marcelo y que luche con Mendy.
Lateral izquierdo de gran zancada, con sus 1,8 metros de estatura, y con un buen toque de balón que demuestra en los centros y en los disparos desde fuera del área, dejando goles de bella factura tanto en el campeonato doméstico como en la ‘Youth League’. Con lo importantes que son los laterales con proyección ofensiva en el fútbol moderno, el Madrid tiene una joya en La Fábrica.