San Mamés mide el hambre de éxito
Athletic Club y Real Madrid escenifican este jueves en San Mamés un duelo que es historia en el fútbol español, dos de los tres equipos que nunca han bajado a LaLiga SmartBank y que en Copa del Rey han protagonizado enfrentamientos para el recuerdo, en una eliminatoria a partido único que mide el hambre de éxito de ambos clubes y al que llega condicionado el equipo de Carlo Ancelotti.
Curiosamente, a pesar del dominio blanco en el resto de competiciones, en la Copa tienen mayor relevancia los 'leones', que han sumado más títulos, 23 -24 según la cuentas del club vasco-, por 19 los blancos. No obstante, esta temporada ambos equipos se han enfrentado en tres ocasiones y en las tres ha ganado el Real Madrid. En el Santiago Bernabéu (1-0), en Bilbao (1-2) y hasta en Arabia Saudí (0-2), en la final de la reciente final de la Supercopa de España.
Uno de los enfrentamientos que más se recuerdan en Bilbao es la final de 1958. Un partido que se tuvo que jugar en el Santiago Bernabéu, algo que molestó mucho en Bilbao, y en la que los desde entonces llamados "Once aldeanos" ganaron al Real Madrid de Alfredo Di Stéfano que encadenó cinco Copas de Europa. Mañana el Athletic gozará, en esta ocasión por mor de sorteo, de ese privilegio. A un partido y en San Mamés.
No es poca cosa para un equipo que ha comenzado pletórico 2022, con cinco victorias, un empate y una derrota en los siete encuentros disputados. Aunque esa derrota fue ante los de Ancelotti. Por lo demás, épica remontada al Atlético de Madrid en semifinales de la Supercopa, 7 puntos de 9 posibles en tres partidos de Liga a domicilio (Osasuna, 1-3; Alavés, 0-0; y Rayo, 0-1) y un triunfo tras prórroga ante el Barcelona en octavos de Copa en "una noche inolvidable".
El Real Madrid quiere la Copa del Rey. Lanzado en LaLiga Santander a por el título y tras la conquista del primer éxito del curso en la Supercopa de España, Ancelotti debe de tomar decisiones que muestren ambición o cautela. Pendiente del estado de su gran referente goleador, el francés Karim Benzema recién recuperado de una lesión muscular, condicionado por el regreso de los jugadores sudamericanos que jugaron con sus selecciones y llegan de un largo viaje sin descanso y sin laterales zurdos puros por la lesión de Ferland Mendy y la sanción de Marcelo.
Desde su regreso a la 'casa blanca', Ancelotti siempre concedió importancia a la Copa del Rey. Para cicatrizar la herida de Alcoy (1-3) dio minutos ante el Alcoyano a titulares como Alaba, Militao, Casemiro, Kroos o Marco Asensio. Era un mensaje que confirmó en el Martínez Valero cuando la dificultad creció ante un Primera en una eliminatoria a partido único, en la que necesitó de prórroga y proeza, remontando con un hombre menos tras la expulsión de Marcelo, para acceder a los cuartos de final.
Fue la demostración de que hay hambre en la plantilla madridista tras un año en blanco y el sorteo deparó un nuevo reto. El ambiente especial de San Mamés espera a un Real Madrid que tendrá que mostrar sus mejores virtudes para acceder a las semifinales, dejar en el olvido las muestras de cansancio físico que dejó antes del parón, cediendo un empate en el Bernabéu ante su última víctima copera, el Elche.
💬 @MrAncelotti: ''Tenemos mucha ilusión. Es un partido muy difícil con un ambiente extraordinario. Para ganar en San Mamés tenemos que dar lo mejor.''#CopaDelRey pic.twitter.com/nZxd2uideZ
— Real Madrid C.F. (@realmadrid) February 2, 2022