La queja de Symmachiarii por las medidas en el viaje a El Molinón
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Bengaleo espectacular por el XX aniversario de Symmachiarii (Galería)
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El oviedismo acude a la cita de El Molinón.
Como cada año, el desplazamiento a Gijón para enfrentarse ante el Real Sporting de Gijón –aunque sea ante su primer filial- está marcado como uno de los más interesantes para todo aficionado del Real Oviedo.
Sin embargo, las últimas medidas que se están tomando en el fútbol español para erradicar la violencia afectaron al viaje a El Molinón de los aficionados carbayones.
Tanto es así, que el Grupo Symmachiarii ha emitido un comunicado para expresar su queja sobre el trato que se le dio este domingo, ya que se le impidió acceder al coliseo sportinguista con pancartas, bombos o banderas.
El texto que ha redactado el grupo es el siguiente:
Desde el pasado 30 de Noviembre muchas cosas han cambiado en este país, la muerte de una aficionado del Deportivo de la Coruña ha hecho que la histeria colectiva den paso a la caza de brujas, a la criminalización intencionada y desproporcionada y a la persecución de todo aficionado que según una “elite” del mundo del futbol considere subversivo o molesto para “su espectáculo”.
Hemos asistido a cierres parciales de grada, a expulsión de aficionados por proferir insultos o canticos considerados “políticamente incorrectos” (¿qué pasaría si estas medidas se tomaran en el congreso o el senado por los insultos que se expresan entre los políticos o en otros ámbitos de la vida?) para el puritanismo que quieren instaurar y a la censura sin tapujos de la libertad de expresión.
Si esa libertad de expresión tan de moda en los últimos días por los desgraciados y aberrantes sucesos ocurridos en Francia y que rápidamente han corrido los políticos de nuestro país a condenar y ensalzar la bandera de la libertad, de la libre opinión, de la defensa de lo políticamente “incorrecto” basado en la libertad de prensa.
Pero todo estos buenos propósitos se quedan en eso, la foto electoralista para la opinión, y mientras tanto los aficionados al futbol en general y de una manera aberrante e insultante aquellos colectivos que nos hacemos llamar ultras, hinchas, supporters… vemos cercenado nuestra libertad de opinión, de agrupación, de expresión y nuestra libertad de portar nuestras ideas, nuestras consignas y nuestras pancartas.
Hoy en El Molinon hemos sufrido un reflejo de injusticia, un ejemplo de censura, en definitiva un ejemplo de coartar la libertad que nuestro grupo tiene de portar una pancarta que nos representa (ni tan si quiera la de carbayones, ya que incitaba a la violencia según ellos), tampoco se nos permitió introducir nuestro megáfono ni nuestros bombos con el único objetivo de animar al equipo.
Todas estas medidas basadas en la seguridad, una seguridad garantizada por el amplio dispositivo de seguridad existente y con el cual hemos colaborado en todo lo que se nos ha demandado, siendo el riesgo de introducir estos elementos inexistente. Creemos por tanto que la incitación a la violencia fue solo una excusa para coartar la libertad, continuar con esta caza de brujas que únicamente pretende acabar con un estilo de aficionado a nivel nacional y que hoy por desgracia hemos sufrido nosotros.
Hoy como grupo no quisimos suspender el viaje pese a todas las trabas que se nos pusieron para estar en el estadio como siempre hemos ido, aunque motivos nos dieran para ello, y no lo suspendimos porque es precisamente lo que quieren, acabar con nuestros viajes, con nuestra animación y ante eso siempre plantearemos la misma batalla, continuar defendiendo nuestro estilo del mundo ultra, apolítico y oviedismo, que es lo único que nos ha movido estos 20 años.
SYMMACHIARII 1994 Ultras, no política.