Prioridad en el mercado: reforzar la parcela defensiva
El Real Oviedo prosigue con la planificación deportiva de cara a la temporada que viene. Tras la promoción de siete canteranos del Vetusta en el primer equipo, la dirección deportiva deberá incorporar a varios futbolistas de nivel si pretende luchar de verdad por acceder a los puestos de play off de ascenso. Y, a tenor de las bajas que se prevén en el conjunto carbayón, la mayor necesidad del equipo está localizada en la parcela defensiva.
Y es que la parcela defensiva se va a ver desprovista de un gran número de efectivos. Al nombre de Oswaldo Alanís se ha sumado Juan Forlín, cuyas salidas ya se han hecho oficiales. Carlos Martínez es otro de los que está en la rampa de salida, tras una temporada gris y marcada por las lesiones. Además, Javi Hernández tiene pretendientes de Primera división, por lo que su continuidad parece muy complicada.
Así las cosas, y tras la promoción de Lucas Ahijado y Andoni Ugarte, la línea defensiva quedaría de la siguiente forma: Diegui Johannesson y Ahijado en el lateral derecho; Carlos Hernández y Ugarte como centrales, con Bolaño como comodín para el eje de la zaga y el lateral junto a Mossa. Es decir: seis defensas para toda una temporada de, como poco, 42 partidos. A priori, parecen pocos para afrontar una competición tan larga.
No cabe duda de que la defensa del Real Oviedo necesita una renovación, tanto en nombres como en la edad de los mismos. La veteranía de jugadores como Bolaño o Mossa hace que la búsqueda de nombres cuente con la juventud como uno de los filtros de búsqueda.