El Sporting reitera su negativa a aceptar las entradas del derbi y el Oviedo responde: "Nosotros sí iremos a El Molinón"

Apenas media hora ha durado la reunión con los representantes del Real Oviedo y del Real Sporting de Gijón celebrada en la sede de Delegación de Gobierno para cerrar los detalles del dispositivo de seguridad del derbi asturiano que tendrá lugar este sábado a partir de las 21.00 horas en el Carlos Tartiere.

El club rojiblanco, representado por Carlos Barcia, director del área corporativa del Sporting, mantiene firme su postura de no tener representación en las gradas del estadio capitalino, ni de aficionados ni tampoco de directivos en el palco. El director del área corporativa del Sporting reiteró la negativa a aceptar las 590 entradas que había remitido el Oviedo, ya que no comparten la obligación de que los aficionados tengan que viajar seis horas antes del encuentro cuando el desplazamiento apenas alcanza los 28 kilómetros de distancia.

Desde el Oviedo no entran a juzgar la decisión del Sporting, aunque aplauden que sus aficionados sí estén dispuestos a aceptar el mismo dispositivo de seguridad para el partido de la segunda vuelta que se celebrará en El Molinón. "Nosotros sí vamos a utilizar las entradas para poder ir al campo y animar a nuestro equipo", explicó Javier Pérez, presidente de la Aparo, a la salida de la reunión.

Antes hablaba el consejero del club carbayón Fernando Corral, quien insistía en que el derbi se desarrolle "con normalidad y la presencia de las dos aficiones". "Sus razones tendrán. No podemos decir nada sobre su decisión. Nosotros habíamos puesto a disposición del club entradas, intentamos que la afición del Sporting viniese", señalaba, a la par que aseguraba que habrá oviedistas en El Molinón: "El apoyo que la afición da al equipo es fundamental, estamos encantados de que los nuestros nos sigan a cualquier campo de España".

Cuestionado por una hipotética comida de directivas, Corral fue irónico: "La pregunta se responde sola. Si no vienen...", señalaba. Y ya en lo meramente deportivo, mostraba su confianza: "Espero que el Tartiere sea una caldera y que el primer gol lo metamos como afición, que ahora que podemos ir en masa, que la gente pueda estar presente. Que sea una olla a presión, que se viva el ambiente festivo que tanto nos merecemos tras estos dos años de limitaciones. La gente tiene que disfrutar del equipo, del partido. Es una hora extraordinaria. Que durante todo el día la gente disfrute, apelando a la responsabilidad. Nos merecemos disfrutar. Será el partido más importante en España", sentenciaba.