El Reale Arena ha dicho bien claro NO al racismo. Tanto la entidad txuri urdin como su afición apuestan por una sociedad inclusiva y respetuosa, como han demostrado en este partido de la jornada 15. Antes de comenzar el encuentro se ha desplegado en el estadio un tifo contra el racismo mientras se disputaba el choque contra la SD Eibar. La pancarta, de 20x30 metros, mostraba el hashtag #StopRacism.
No hay excusas. No caben actitudes de tiempos pasados. Hagamos un mundo mejor entre todas y todos. Stop al racismo, dijeron por megafonía lo que fue respondido con fuertes aplausos.
Cabe recordar que el sueco sufrió un episodio de racismo en el partido que su selección jugó frente a Rumanía en Bucarest el pasado 15 de noviembre, lo que le llevó incluso al árbitro a preguntarle al delantero txuri urdin si quería que suspendiera el partido. Isak se negó, pero la UEFA informó la semana pasada de la apertura de una investigación por estos incidentes racistas.
Tras el pitido final los jugadores suecos abrazaron a Alexander Isak, de raza negra, y celebraron el triunfo, que les calificaba como segundos por detrás de España para la Eurocopa 2020. También sus compañeros de la Real mostraron su apoyo al nórdico en las redes sociales.