2-4, min. 81: Rodrygo.
3-4, min. 90+3: Nacho.
0-2, min. 54: Isak.
0-3, min. 56: Isak.
1-4, min. 68: Merino.
Hazaña histórica en el Bernabéu
Sí. Se logró. Sí, ganamos. Sí, es cierto, no es un sueño. Sí, la Real Sociedad está en semifinales. Recuerden este once: Remiro, Gorosabel, Aritz, Le Normand, Monreal, Zubeldia, Merino, Odegaard, Oyarzabal, Januzaj e Isak, más Barrenetxea, Guevara y Aihen. Estos jugadores se convirtieron en gigantes en el Santiago Bernabéu. La crónica no podía titularse más que 'Hazaña histórica' por una clara razón: la Real repitió la proeza de 1988 y llama a las puertas del cielo.
La Real hizo un partido para quitarse el sombrero, y a pesar de ello sufrió hasta el último instante para conseguir el billete a semifinales. A pesar de marcar cuatro goles en el Santiago Bernabéu, terminamos pidiendo la hora (3-4). Los de Imanol tuvieron que hacer frente al Real Madrid, al escenario y a Mateu Lahoz, que solo pitó en contra de un equipo, y se pueden imaginar de cual.
Pero era la noche de la Real. Sí, de la REAL SOCIEDAD con mayúsculas. El equipo que está en semifinales de la Copa del Rey por méritos propios. Sueñen.
Superioridad txuri urdin
Los dos equipos salieron con su 4-3-3 habitual. El primer acercamiento de la Real Sociedad se produjo por banda derecha con un centro de Gorosabel al que no llegó Oyarzabal y después James disparó, pero su chut pegó en la defensa txuri urdin y llegó manso a las manos de Remiro.
La Real no quería riesgos, y eso que en el 9' Benzema tuvo la primera clara del partido tras un fallo en la salida del balón de Oyarzabal y Benzema que remató el francés dentro del área, y que desvió Remiro a córner.
Los primeros quince minutos estaban siendo de tanteo, aunque Mateu Lahoz se dejó ver pronto con una amarilla a Odegaard por una falta sobre Ramos, en la que apenas hubo contacto.
El Real Madrid estaba dejando jugar, pero en esta ocasión a los txuri urdin les interesaba hacer un partido largo. La Real botó su primer córner en el 15', el balón le cayó a Isak que estaba solo en el punto de penalti pero no definió bien. Los seguidores blanquiazules que se habían dado cita en el Santiago Bernabéu comenzaron a corear el nombre del sueco sabedores que está en racha. Hacían falta como nunca sus goles.
Los de Imanol no regalaban el balón, pero Mateu empezó a hacer de las suyas. Le perdonó la amarilla a James tras una dura entrada sobre Monreal y sin embargo no dudó en mostrársela a Le Normand en la siguiente jugada, para cargar así ya a un central blanquiazul con una cartulina con todo el partido por delante. La falta peligrosa botada por Kroos se marchó alta.
En el 21' la Real encontró petróleo. Alexander Isak disparó con dureza, Areola no logró detener el esférico, y el rechace cayó a los pies de Odegaard que disparó raso colando el esférico entre las piernas del francés tras pegar en Militao. ¡Gol de semifinal! El noruego no lo celebró pero si todos los realistas que estaban allí. ¡Qué importante!
Había que aguantar como fuera la reacción del Madrid posterior al gol. De primeras lanzaron un saque de esquina que se lanzó sin peligro y luego una jugada de Vinicius internándose en el área no la aprovechó Benzema. Era fundamental mantener la cabeza fría.
El show must go on de Mateu Lahoz no paraba. Primero no pitó falta sobre Merino y el posterior rodillazo de Marcelo sobre Odegaard tampoco fue sancionado. Le costó recuperarse al noruego, pero por suerte la entrada le pilló en el área.
La primera media hora estaba siendo para la Real mostrándose superior a los madrileños en su propia 'casa' y jugando con una gran madurez. Saltó la alarma cuando Guevara,Barrenetxea y Portu saltaron a calentar ya que Odegaard seguía resintiéndose del entradón de Marcelo que Mateu, curiosamente, no había visto.
El partido entró en una fase de locura. Primero Alexander Isak remató alto y posteriormente Álex Remiro se erigió en protagonista al despejar un zurdazo de James. El colombiano recogió un balón en la frontal pero su chut fue repelido por el de Cascante. El Real Madrid estaba jugando sus mejores minutos del primer tiempo, pero la Real pudo sumar su segundo tanto en el 36' en un balón al que no golpeó bien Odegaard.
Un remate de Valverde que mandó Remiro a saque de esquina y el cabezazo posterior de Ramos al palo pusieron el corazón en un puño a todos los realistas. Estaban sufriendo los de Imanol en los últimos cinco minutos. El Real Madrid quería igualar el choque antes del descanso, por lo que eran momentos muy importantes ya que conseguir llegar al descanso con ventaja permitía afrontar la segunda mitad intentando aprovechar los espacios que iban a tener que dejar los de Zidane. Había que ponerse el mono de trabajo.
Antes del 45' Alexander Isak perdonó por partida doble. En primer lugar el sueco mandó alto un balón a centro de Merino, y posteriormente el buen pase en largo de Remiro sobre Oyarzabal y el centro del eibarrés al área volvió Isak a enviarla fuera.
El nórdico estaba perdonando lo que no había fallado jornadas atrás. La primera mitad no dio para más, y se alcanzó el descanso con el 0-1 en el marcador.
Goles de semifinal
La segunda parte comenzó con un cambio en cada fila. En lo referente a la Real salió Barrenetxea en lugar de Januzaj, pero Odegaard afortunadamente pudo continuar.
Solo se llevaban disputados tres minutos de la reanudación cuando Alexander Isak envió al fondo de las mallas un gran pase de Martin Odegaard. Lástima que el sueco estaba en claro fuera de juego porque hubiera sido un golazo.
El sueco se cabreó. Había fallado dos claras en la primera parte y encima le habían anulado un gol, así que dijo: 'Hasta aquí'. Corría el minuto 53' cuando Barrenetxea encaró a Nacho, lo rompió, puso un centro al corazón del área y allí estaba Isak para lograr el 0-2 de voleón.
Y sin tregua llegó el tercero. Y de quién si no... ¡oe oe oeeee Isak Isaaak! Zapatazo del sueco a la escuadra del palo corto y 0-3 Se revisó por si había fuera de juego, pero no, golazo con todas las letras. Menudo subidón.
Marcelo recortó distancias poco después y el tanto espoleó por unos minutos a los de Zidane. Sobre todo con un remate de Vinicius que no entró de milagro. Madre mía lo despacio que iba el reloj... todavía faltaban 20 minutos y parecían una eternidad. Veinte minutos para la gloria. A pesar del gol de Marcelo la Real parecía tener el partido controlado.
Y más cuando en el 68' llegaba el cuarto. Esta vez por medio de Mikel Merino. Y sí. Era cierto. La Real anotaba el cuarto tras una jugada de Isak por banda derecha, centro al área y el navarro, completamente solo parecía finiquitar la eliminatoria.
Imanol introdujo el último cambio para sostener lo que restaba de partido. Antes había cambiado a Odegaard por Guevara, y la última permuta fue la de Aihen Muñoz por Isak. Los aficionados txuri urdin despidieron al sueco con una ovación. El equipo pasaba a tener defensa de cinco.
Sin embargo el Real Madrid es el Real Madrid y no se daba por muerto. Y es que en el 79' Vinicus anotaba el segundo de los blancos tras rematar solo, y con manos blandas de Remiro que no pudo atajar. Pero era la noche de la Real y hasta el VAR estaba de su parte porque el tanto fue anulado. Quedaba poco para algo muy grande.
Pero estábamos condenados al sufrimiento, y es que Rodrigo anotó en la jugada siguiente. Esta vez su tanto sí subió al marcador. La Real se había metido muy atrás como era de esperar porque los de Zidane debían apurar sus opciones. Incluso hubo tiempo para otro gol de Nacho que casi nos mata de un susto.
Pero no. Era la noche de la Real porque se lo había ganado. Sí, frótense los ojos porque es verdad. La Real está en semifinales con Granada y Mirandés de momento. Sueñen porque todo es posible. Disfruten, porque la Real ha logrado la gesta. La Copa pinta txuri urdin.
Próxima jornada
La Real Sociedad estará en el bombo de semifinales de este viernes. Solo queda un partido más para llegar a la final de Sevilla. ¿Y quién dice ahora que no es posible? Noche mágica.
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