El orgullo de lucir el escudo de la Real 'grabado' en el ojo

La Real Sociedad siempre ha sido un club muy querido más allá de Gipuzkoa. Son muchos los aficionados con los que cuenta el conjunto txuri urdin en todo el territorio nacional, que además tienen detrás historias increíbles de contar. Es el caso de Jesús Ruiz Santiago, a quienes muchos ya conocerán de cuando contó su historia por primera vez en 'El Rincón de la Real'. Se trata de un granadino nacido en Limones, y que a los 7 años se mudó a vivir junto a su familia a Hospitalet de Llobregat. Fue en este municipio de Barcelona donde nació su amor por la Real gracias a la figura de Luis Arconada. En el vídeo que acompaña a esta noticia cuenta cómo surgió ese sentimiento blanquiazul, así como la historia de lo que le sucedió en el ojo.

Jesús Ruiz Santiago había tenido problemas de vista desde pequeño, pero con 18 años sufrió un desprendimiento de retina en el ojo izquierdo y con el tiempo acabaron colocándole una prótesis. Ese 'reemplazo estético del ojo' terminó años después con el escudo de la Real Sociedad grabado en el mismo. En ElDesmarque Gipuzkoa hemos hablado con este aficionado txuri urdin para saber todos los detalles:

-Su amor por la Real nace de...

"Yo me hice de la Real de pequeño. Cuando tenía 6 o 7 años estaba viendo a la selección española por televisión y en la portería había un 'tal' Arconada que me encantaba. No sabía ni de qué equipo era. El caso es que un día jugando en la calle con amigos teníamos que elegir un equipo de fútbol cada y los que salían era Barcelona, Real Madrid o el Espanyol, al estar en Barcelona. Había alguno también del Atlético de Madrid o del Athletic, ya que tampoco se podía repetir. Yo entonces tampoco sabía qué equipos podía elegir. Cuando pregunté me dijeron también estaba la Real, que por entonces estaba en los puestos de arriba".

"Pregunté por los jugadores de la Real y me dijeron Satrustegui, Zamora, Arconada... y cuando me dijeron Arconada, que ya empezaba a ser mi ídolo, lo vi clarísimo y dije: 'yo seré de la Real, pero no hoy, lo seré siempre'. A partir de ahí me fui interesando un poco más en la ciudad del equipo, qué jugadores habían jugado allí o iban a jugar... en aquel momento todo era más épico, ya que no había internet para poder informarte y lo hacías a duras penas".

"Nosotros somos siete hermanos y siempre hemos sido una familia humilde, por lo que no podíamos comprarnos todos los días periódicos deportivos, así que la información que yo podía conseguir era más bien escuchando la radio. Así me fui  enterando de cosas de la Real".

"A mis amigos de esa edad: 7,8 o 10 años les resultaba curioso que uno de su entorno fuera de la Real, porque los demás eran del Madrid o del Barça casi al 100%. Les hacía mucha ilusión encontrar cosas para mi. Cuando encontraban cualquier cosa de la Real como los cromos que salían en las meriendas o los mismos cromos de la Liga, siempre me buscaban para dármelos. Recuerdo con mucha alegría estar comiendo en casa y que picaban a la puerta. A lo mejor era un amigo que se había encontrado un cromo de Arconada o de cualquier otro jugador y a mí la verdad es que me hacía mucha ilusión. Luego ya, de más mayor, me picaban a la puerta y me iban a buscar para regalarme a lo mejor entradas o invitaciones que habían conseguido gratis para poder ver un partido por ejemplo entre el FC Barcelona y la Real o del Espanyol y la Real, y me las daban con alegría y satisfacción sabiendo que a mí me hacía mucha ilusión. Todo eso lo recuerdo con mucha alegría".

"Desde entonces soy de la Real por siempre. Veo a la Real Sociedad como de forma platónica, me gusta el escudo y tengo sentimientos cuando lo veo. No soy un aficionado que se sepa las fechas o los nombres de todos los jugadores, soy más de sentimientos. Lo siento y ya está. Cualquier jugador que ha vestido la camiseta de la Real será de la Real siempre".

-Su problema en la vista y la prótesis con el escudo de la Real Sociedad

"El defecto que yo tengo la vista me viene de bien pequeño, casi de recién nacido. Siempre he sido muy miope y es debido a hacer tanto deporte, que siempre hice mucho. Cuando tenía 18 años sufrí un desprendimiento de retina en el ojo izquierdo y lo perdí después de operarme varias veces. En el ojo derecho cada vez he ido teniendo menos vista hasta la actualidad, que soy afiliado a la ONCE y solo tengo un 0,9% de visión. Esto nunca me ha impedido hacer una vida normal y he trabajado en la construcción, de jardinero... también he tenido que ir dejando trabajos por culpa de la vista, pero siempre me han surgido otros y me he ido adaptando".

"Cuando perdí el ojo me tuve que adaptar a trabajar con un ojo solo, lo único que al ponerme silicona en una de las operaciones ésta se endureció y al cabo del tiempo se endureció tanto, que fue desplazando el ojo hacia fuera. Llegó un momento en el que ya, aparte de ser una cosa algo tétrica de ver, me hacía daño. Los médicos decidieron que me tenían que vaciar el ojo. Me daba un poco de miedo porque una cosa es quedarse ciego y otra que te vacíen el ojo. Llegó un momento en que no quedaba otra, y me pusieron una prótesis normal, una copia exacta del otro ojo en una prótesis. Yo encantado de la vida, porque estaba todo bien. Lo único que no puedo parpadear bien, pero aparte de eso la prótesis me fui muy bien"

"Yo sí fantaseaba con ponerme un 'gacheto ojo', una espcie de cámara de fotos o de vídeo, siempre en plan de broma, nunca en plan serio. Pero al final mirando por redes sociales fui viendo gente que hacía algún montaje de alguna pupila con el escudo de la Real acompañada de frases muy bonitas, y ahí lo vi claro. Dije... 'esto me lo tengo que hacer yo'. El hecho de tener un ojo con el escudo de la Real me flipaba, quería tenerlo, aunque me daba mucha vergüenza tener que explicárselo al técnico de la prótesis. Al final me atreví y a la tercera prótesis, porque cada tres años me hago una nueva, se lo propuse. Le dije que le tenía que hacer una pregunta friki y le hablé de la posibilidad de hacerme una prótesis con el escudo de la Real. Se echaron a reír y me dijeron que por qué de la Real y no del Barcelona, y les expliqué que yo era de ese equipo".

"Entonces me dijeron que sí, que podrían hacerme un par de prototipos a ver cuál me gustaba más y que yo eligiera. Supongo que ellos pensaron que a mí me gustaría más si no se veía tanto, pero no, yo quería que se viera, y ahora llevo ahora con el escudo en todo el ojo aunque muy difuminado, como si estuviera de fondo. Me daba mucho miedo a que pudiera quedar como algo muy estridente porque yo no soy una persona tan atrevida como para ir con algo muy estridente por la calle, pero en el peor de los casos pensé: 'si no me lo puedo poner porque queda demasiado estrambótico, pues tendré un ojo con el escudo de la Real aunque sea en un cajón'. Pero no. Es más, para la próxima prótesis que me haga  diré que se me se vea un poco más el escudo. Estoy muy agradecido con el trabajo, porque quedó espectacular".

Jesús Ruiz: "No soy un aficionado que se sepa las fechas o los nombres de todos los jugadores, soy más de sentimientos. Siento la Real y ya está"

-¿Qué jugador de la actual plantilla de la Real es el que más le gusta?

"De la plantilla actual, el jugador que más me gusta es Willian José. Para mí sigue siendo un jugador muy importante dentro de la plantilla a pesar de que ha estado a punto de salir de la Real. Luego los grandísimos jugadores que todos tenemos en la cabeza como Oyarzabal y compañía, pero con Willian José es con el que yo me quedo si tengo que elegir a uno".

-¿Qué es lo que más ilusión le haría relacionado con la Real?

"Lo que más ilusión me haría en esta vida es poder conocer a Arconada, algo que ya pude hacer el pasado verano gracias a Carlos, administrador de la página 'Zona Txuri Urdin'. Al enterarse de mi historia y verla a través de las redes sociales se puso en contacto conmigo para que pudiera viajar a San Sebastián y poder conocer a Arconada. Si hubiera sido por mí, me hubiera ido en el mismo momento de recibir el mensaje. Hubiera salido corriendo, pero por circunstancias no pudo ser hasta el año siguiente, que fue el pasado verano en la inauguración del 'nuevo Anoeta'.

"Vi el partido de la Real contra el Atlético de Madrid que ganamos y aquello ya fue apoteósico. Ver el estadio de tu equipo lleno de gente de la Real, fue espectacular, indescriptible para alguien que lo vive por primera vez. He estado en el Camp Nou y no me impresionó tanto. Me pareció algo alucinante. Además conocí a Arconada y estuve tomando unos pintxos con él. Me habló de los recuerdos y me emocioné porque fue una pasada. Luis es una persona maravillosa. Le hice un regalo de un libro con los recuerdos que yo tengo de recortes con sus fotos. Me preguntó si sabía a qué correspondía la foto de la portada en la que salía como él solo reflexionando, y me dio mucha vergüenza reconocer que no, quizás por los nervios, pero era la foto de la final de la Copa del Rey".

"Me estuvo explicando que se trataba de una imagen en la que estaba pensando en lo que le pasaba por la cabeza en ese momento, que quería estar un poco al margen de los compañeros. Es una de las cosas más bonitas que me ha pasado en la vida y que no olvidaré jamás. Recuerdo que antes de esto hubo un momento en el que le mandé unos dulces típicos de Granada, unos piononos. Le mandé tres cajas de estos dulces típicos de Granada. El caso es que él se vio en la necesidad de llamarme y decirme que "no hacía falta". Por supuesto que no hacía falta, pero la ilusión que te hace poder hacerle un regalo o tener un detalle con alguien que es tu ídolo...

"Al poco tiempo de mandárselos me sonó el teléfono y al otro lado de pronto sale una voz que me dice: 'hola, soy Luis Arconada'. Se me puso la piel de gallina. Me dijo: 'Era para agradecerte el regalo, pero de verdad que no hacía falta. Ya nos veremos cuando vayas a San Sebastián'. Simplemente ya el recibir la llamada y  haberle podido conocer tiempo después tomándome unos pinchos con él... Como portero no voy a descubrirlo ahora, pero como persona es increíble. A veces tienes miedo de conocer a tus ídolos por miedo a que se te caiga el mito, pero en este caso fue todo lo contrario. Me encontré con una grandísima persona que ama a su familia, a sus nietos de los que hablaba maravillas... Si me preguntas cuál es la ilusión de mi vida respecto a la Real, a quién quiero conocer o qué me haría feliz, ya lo tengo cumplido. No tengo más techo al que subir".