El Take Kubo más sincero: su relación con Imanol y la decisión de fichar por la Real Sociedad

La Real Sociedad ha tenido un acierto pleno con los fichajes esta temporada. Poco que decir a la mala suerte de la lesión de Sadiq Umar, que se rompió el ligamento cruzado a los 10 días de llegar a Donostia, pero los otros cuatro futbolistas que han recalado en la plantilla de Imanol Alguacil están dado un rendimiento inmediato. Uno de ellos es Take Kubo, el japonés que vino desde el Real Madrid consciente de que estaba ante la oportunidad de poder demostrar por fin todo su potencial tras varias temporadas cedido. Y de momento, su rendimiento en el conjunto txuri urdin, no ha podido ser mejor. El nipón habló ayer en la sala de prensa de Anoeta tras el partido frente al Espanyol que terminó con victoria por 2-1.

Has caído de pie en la Real. ¿Cuál es el secreto de tu actual mejor versión? "Yo tampoco puedo explicar muy bien lo que me está pasando. Lo que sí que me acuerdo es que en los hoteles donde estuve aquí en pretemporada pensaba que no tenía otra, que esta podía ser mi última oportunidad para dar ese salto como futbolista. De momento creo que estoy cumpliendo con lo que la gente espera de mí".

La afición te despidió ayer coreando tu nombre. "Eso me ha dado mucha confianza. La afición al final es la que opina. Está el míster, el cuerpo técnico y los jugadores, pero el fútbol es entretenimiento de alguna forma, y la afición es la que opina. Ellos pagan la entrada, vienen a vernos y cuantos más contentos estén, mejor para nosotros. Sobre todo esa ovación me ha gustado mucho".

¿Cómo has gestionado la presión de saber que te querían y lo que se esperaba de ti? "Fui a hablar con el presidente (Aperribay) estando yo en el Real Madrid, y ahí me dijo que me seguían desde hace tres años y me lo explicaron. Yo ya lo sabía. Entonces decidí optar por un club que me quiere, un entrenador que me quiere, y ya todo dependía de mí. De momento lo estoy sacando adelante".

¿Te sientes cómodo en el ecosistema que rodea a la Real? Zubieta, la forma de trabajar, el juego... "Sí, tanto lo que se trabaja en la Ciudad Deportiva como luego lo que jugamos aquí en el estadio yo creo que es mi estilo. Me gusta como trabaja el equipo, me gusta demasiado cómo juega el equipo en los partidos sobre todo rodeado de jugadores muy importantes, técnicos y fluidos arriba, y me encuentro muy a gusto".

Además de talento, también se te ve mucho sacrificio en el campo. "Sí, ya me ponían siempre esa pega de que me costaba defender, de que no ayudaba al equipo. Yo creo que este año estoy pudiendo demostrar que también trabajo defensivamente y que pueda ayudar. Hoy una vez más estoy contento por eso".

¿En qué posición te ves más cómodo? Al tener dos partidos cada semana yo creo que no podemos jugar siempre los mismos, como ha podido pasar la semana pasada o la anterior. Iremos cambiando de jugadores y yo también me iré cambiando de posición. Pienso adaptarme a lo que me diga el míster. Antes de venir le dije al míster que yo me adaptaba a todo, pero que la banda izquierda no era la preferida, y hoy por hoy, por ejemplo, estoy muy contento en la banda izquierda. Creo que me puedo adaptar a todas las posiciones salvo jugar como único punta, como punta de referencia.

¿Cómo es tu relación con Imanol? "Me acuerdo que el día que vine aquí él estaba muy tranquilo, pero después, por ejemplo el día que vino Sadiq ya estaba más suelto, gritaba más, y ya me acostumbré. Pero también es verdad que antes de cada entreno se da a la mano con todos los jugadores y después también habla con todos. Eso, cuando un jugador lo ve, siente confianza. En mi caso, aunque no estuviera jugando, sabría que el entrenador confía en mí y cuando llegue mi momento tendré que dar lo máximo porque el entrenador me está viendo o te aprieta aunque no juegues. Es verdad que grita, pero mejor que te grite. Si no grita ahí yo notaré que estoy perdiendo algo".

El 1-0 ante el Espanyol tras el robo de balón de Kubo

Valoración de tu partido ante el Espanyol. "Creo que bien, me puedo dar un aprobado".

Jugada en la que roba el balón y marca Sorloth. "Me acordé de la pretemporada, tuve una jugada similar contra el Athletic Club en la que acabé no yendo y se me vino a la mente. En principio, como me quedé en el suelo, pensé que era penalti y lo iba a pedir golpear, pero cuando empezó a volver al medio del campo intuí que era gol".