Suárez no despeja las dudas sobre una posible venta
Después del movido inicio de verano, lleno de noticias acerca del futuro del Real Valladolid, parece que las aguas volvieron a su cauce. Tras varias semanas sin pronunciarse sobre una posible venta, Carlos Suárez rompió su silencio al presentar la campaña de abonados.
Entonces aseguró que en el primer partido de Liga iba a estar sentado en el palco como presidente y, aunque sigue manteniendo que "todo parece indicar que va a ser así", sus palabras durante la rueda de prensa de presentación de Rubén Alcaraz, no terminan de aclarar qué puede ocurrir más adelante: "De momento no ha pasado nada. Sigo trabajando con ilusión y ganas. Estoy dispuesto a decidir todo lo que sea mejor para este club. Eso es lo más importante, no yo. Va a ser un año muy duro porque tenemos que hacer frente a nuestras obligaciones".
Por eso asegura que no hay nada raro en la Junta General Extraordinaria de Accionistas convocada a primeros de septiembre: "No prevemos que haya nada, de momento, sorpresivo. Simplemente es por el cambio de la circular 1/2018, para que el Consejo apruebe el presupuesto y que la Junta vaya avanzando".
El tope de abonados, muy cerca
El máximo mandatario blanquivioleta se mostró además "muy muy contento" por tener muy cerca el objetivo de llegar a los 20.000 abonados: "Lo decía en la presentación de la campaña y me mirabais raro. Doy las gracias a todo el mundo porque ha sido espectacular. Si tuviéramos más plazas, habría más gente".
Las obras en el Nuevo Estadio José Zorrilla van según lo previsto: "Es importante adaptarnos a la normativa. Vamos a tener de todo". Y sobre una posible reforma más profunda con patrocinadores externos, Suárez anunció que "cuando tenga que comunicar algo, lo haré. En el futuro, Dios proveerá".