Otra más para la lista: el polémico penalti que quitó la ventaja del Pucela
El Real Valladolid ha visitado al Sevilla FC en el duelo correspondiente a la jornada 32 de LaLiga Santander. Un choque intenso que los mínimos detalles podrían decantar la balanza para un lado u otro. Y en esos mínimos detalles se ha derivado la polémica. Ya que el conjunto pucelano se adelantó con un gol de Kiko Olivas, pero podría haberlo hecho anteriormente.
El gol del Sevilla fue precedido en la recta final de un penalti que difícilmente se explica. Centro de Jesús Navas, remate de Sergio Escudero, toca en Youssef En-Nessiry y ese balón rebotado golpea en las manos de Javi Sánchez. Valentín Pizarro Gómez lo tuvo claro. El VAR lo confirmó, pero otra jugada controvertida en contra para el Pucela que perdió dos puntos en esa jugada.
En una de las primeras jugadas del encuentro el sino del partido puedo haberse cambiado si Pizarro Gómez hubiese visto algo punible en unas manos de Diego Carlos dentro del área. Una jugada rápida y que casi nadie se percató, ya que protestaron pocos jugadores del Pucela. Un fuerte disparo de Waldo Rubio, que golpea entre el muslo y la mano. Una jugada demasiado rápida y que se puede apreciar que el central sevillista está por muy poco fuera del área y por ello no entró el VAR a valorarla.
En otra jugada posterior, Fernando Reges vio la tarjeta amarilla por una dura entrada que podría haber sido de otro color perfectamente. El mediocentro brasileño no calculó bien y pudo haberse llevado un castigo mayor si Pizarro Gómez así lo hubiese decretado.
Cuando no se quiere ser parcial da lo mismo que pongan VAR o 18 árbitros, ni una sola imagen clara se vió demostrando que fue mano, vergonzoso total. Estaba deseando el árbitro poder entrar en juego y beneficiar al grande.