El Real Valladolid se quedó con la miel en los labios en el encuentro del pasado domingo ante el RC Celta de Vigo en el Estadio Abanca-Balaídos. El gol de Fabián Orellana en el minuto 70 sirvió para poner por delante al conjunto blanquivioleta y, según fueron transcurriendo los minutos, no sólo la esperada victoria estaba cada vez más cerca, sino que el Pucela tenía en sus manos la posibilidad de dejar la portería a cero, algo que se le está resistiendo y sólo ha podido lograr dos veces en la presente temporada, al igual que el Levante UD. Finalmente, esa esperanza se esfumó con el gol de Jeison Murillo en el tiempo de descuento y, con ello, ya encadena ocho jornadas consecutivas encajando.
El Real Valladolid es, junto al Levante, el equipo que sólo ha dejado la portería a cero en dos ocasiones esta temporada. Sin embargo, la situación entre ambos conjuntos es diferentes, mientras el Pucela se sitúa en decimoséptima posición, al borde del descenso, con 22 puntos, el Levante respira aliviado con sus 32 puntos que le aúpan a la novena plaza.
No obstante, para los de Sergio González la situación es preocupante y dejar la portería a cero se convierte en una tarea costosa e incluso milagrosa. En 25 encuentros, la escuadra blanquivioleta ha dejado, en tan solo, dos encuentros la portería inmaculada. Las dos han sido fuera del Nuevo Estadio José Zorrilla, la primera en su visita en el Estadio Ramón de Carranza, donde cadistas y pucelanos empataron a cero. La segunda de ellas, en Getafe, donde Shon Weissman marcó el gol de la victoria en el minuto 37. En las dos 'hazañas', Jordi Masip fue el encargado de custodiar la portería blanquivioleta. Por su parte, el segundo guardameta pucelano, Roberto Jiménez, estuvo a un suspiro de lograr el objetivo que tanto se le está negando al Real Valladolid.
En el ámbito defensivo, los datos no avalan al Pucela. Es el cuarto equipo que más disparos concede, con una media de 12,8 tiros por partido, sólo superado por el Valencia CF, el Elche CF y el Granada CF. Además, es el tercer equipo de LaLiga Santander que menos entradas realiza, con una media de 15,6 por partido.
Los 36 goles encajados tienen dos protagonistas diferentes. Roberto comenzó la campaña como titular ante el positivo por coronavirus de Masip. El arquero madrileño tiene un promedio de 1,57 goles por encuentro, es decir, en sus siete titularidades ha encajado 11 tantos. Por su parte, el catalán firma un promedio de 1,38 goles por partido (25 dianas encajadas en 18 encuentros).
Transcurren las jornadas y el Real Valladolid sigue sin encontrar una solución firme para evitar encajar en, prácticamente, cada encuentro. Las piedras en el camino cada vez son de mayor tamaño y la travesía del Pucela por la temporada 2020/2021 cada vez se pone más cuesta arriba.