Reapariciones y "ritmo de balón" en los Anexos

El Real Valladolid volvió a la normalidad este lunes. Frenado el mayor brote de coronavirus que ha vivido el vestuario desde el inicio de la pandemia, el entrenamiento volvió a ser colectivo y a la vista de los medios de comunicación, incorporando algunos jugadores que, bien por precaución o bien por contagio, no habían podido ejercitarse con el resto la semana anterior.

Fueron los casos de Javi Sánchez y José Antonio Caro, que, una vez superado el covid-19, reaparecieron en los Campos Anexos para trabajar al margen. De esta manera, son seis los casos activos de coronavirus que actualmente tiene el Pucela: Fede San Emeterio, Álvaro Aguado, Saidy Janko, Víctor García, Roque Mesa y Moi Delgado. Todos ellos se ausentaron de una sesión que tampoco contó con la presencia de los lesionados y tocados Pablo Hervías, Raúl García Carnero, Kike Pérez y Moctar Sidi El Hacen.

Por su parte, Sergio Benito, Sekou Gassama y Anuar Tuhami, que han superado recientemente molestias físicas, trabajaron al margen de un grupo que contó con el portero fichado para el Real Valladolid Promesas, Samu Casado. Además. Además, Rubén Alcaraz completó sólo la primera parte de la sesión.

Charla grupal y ejercicios marcados

Tras unos días de contratiempos, el entrenamiento comenzó tras una charla en la que José Rojo, Pacheta quiso dirigirse a los miembros de su plantilla, incluyendo a todo su staff y empleados, como el delegado del equipo, Paco Santamaría.

El técnico insistió este lunes en ejercicios con la pelota, prestando especial atención a las rápidas contras con finalización. Es ahí cuando llamó la atención de los suyos en varias ocasiones: "¡Posesión y ritmo de balón! ¡Ritmo de balón!".

Este martes, en doble sesión, el equipo blanquivioleta dará continuidad al trabajo para seguir preparando los amistosos del próximo fin de semana en Soria y en Medina de Rioseco.