El Pucela derrota al Rayo con poco fútbol y muchos goles

El Real Valladolid se llevó (3-1) el XLVII Trofeo Ciudad de Valladolid ante el Rayo Vallecano con alguna que otra facilidad, aunque demostrando que le falta rodaje de cara al inicio liguero ante la Unión Deportiva Las Palmas. Las continuas pérdidas de balón en salida y las dudas en ataque con Shon Weissman como buque insignia no impidieron que el Trofeo se quedara en un Nuevo Estadio José Zorrilla que volvió a vivir el calor de sus simpatizantes, tras 514 días sin poder hacerlo.

La puesta en escena

Con ganas de reivindicarse tras el regreso de la afición a su Estadio. Así salía el Pucela desde el inicio, ya que no quería que el Rayo llevara la iniciativa. De hecho, el marcador se movía, por ello, en los primeros compases para los locales. Lucas Olaza, en el minuto 7 de partido, transformaba (1-0) una falta directa batiendo a Luca Zidane. Los de José Rojo, Pacheta se adelantaban, pero los errores en salida de balón dejaban alguna que otra duda en Zorrilla.

La alineación que presentaba el técnico burgalés era una prueba más que suficiente de lo que quería el técnico. Es decir, un equipo valiente y con el objetivo de salir desde atrás con la bola. Sin embargo, sin que el Rayo quisiera apretar, los pucelanos no conseguían dar dos pases seguidos en su campo. El atrevimiento de querer colocar a Toni Villa como futbolista creativo en una posición muy novedosa para él, daba el fruto de la victoria, pero nada más.

El juego no era ni vistoso, ni convencía, ya que el equipo blanquivioleta no proponía nada más que errores infantiles de desplazamientos sencillos en zonas peligrosas de cara a una posible contra del rival. El Rayo estaba a punto, pero Jordi Masip evitaba la igualada de Randy Nteka en el minuto 18. A partir de ahí, el Pucela encontraba a Jawad El Yamiq como jugador indispensable para sacar el balón jugado.

La intensidad de los visitantes

El Rayo se daba cuenta, pero no quería cambiar un guion marcado por la intensidad y por la presión tras pérdida. Instantes después, llegaba la pausa de hidratación y, con ella, los primeros cambios del técnico blanquivioleta. Entraba José Antonio Caro por Jordi Masip y Álvaro Aguado por Fede San Emeterio. Las sustituciones no alteraban lo que el partido ofrecía. Incluso, Pacheta pedía tranquilidad a los suyos, ya que veía que la precipitación reinaba por momentos.

Con todo y con ello, el encuentro encaraba la recta final del primer acto con el marcador favorable para los pucelanos, pero Weissman, en el minuto 42, tras el regalo de Marcos André de Sousa, recibiendo, a su vez, el de Esteban Saveljich, dejaba en el suelo a Luca Zidane, para aventajar (2-0) a su equipo en un partido que no brillaba por la apuesta en el terreno de juego de ambos conjuntos.

El segundo acto comenzaba con una nueva batería de cambios con la entrada de Bruno González, Nacho Martínez, Sergi Guardiola, Sekou Gassama, Fabián Orellana, Roberto Corral, José Luis 'Kuki' Zalazar por Luis Pérez, Marcos André, El Yamiq, Joaquín Fernández, Olaza, Óscar Plano y Weissman. Toda esta energía depositada daba como consecuencia el tercero. Toni, uno de los pocos que se quedaban en el campo, ponía un balón que hacía bueno la defensa de los de Andoni Iraola. En una acción de muy poca fortuna, colaboraban para el 3-0.

El Rayo quería recortar distancias por medio de Álvaro García, pero un inspirado Caro, se lo impedía al cuarto hora de juego de la segunda mitad. El portero recibió una de las ovaciones de los suyos dejando su lugar a Roberto Jiménez, que acababa el partido defendiendo la portería blanquivoleta. En ese mismo instante, Javi Sánchez entraba por Kiko Olivas ya pasados los 60 minutos de encuentro.

Merecido gol visitante

El partido, en estos compases, sólo dejaba los detalles de las nuevas sustituciones, ya que Roque Mesa, Sergio Benito y Víctor García entraban en el lugar de Sekou, Aguado y Toni. Este último jugaba todos los minutos que no había tenido en Tordesillas y la afición le reconocía el esfuerzo.

Los de Iraola cambiaban varias de sus piezas y acortaba distancias con un gol (3-1) de Mario Suárez tras una falta botada por Isi Palazón en el minuto 71. Y lo seguían intentando hasta el final viendo que el Pucela había bajado los brazos sin tener porqué. Pero, los goles de la primera y el escaso acierto del rival en los minutos finales decantaban la balanza para alegría de los de Pacheta que se verá las caras con la Sociedad Deportiva Amorebieta el próximo viernes para cerrar la pretemporada 2021/2022.

Ficha técnica

3 - Real Valladolid: Masip (Caro, min. 32; Roberto, min. 61); Luis Pérez (Bruno González, min. 46), Joaquín Fernández (Corral, min. 46), Kiko Olivas (Javi Sánchez, min. 61), El Yamiq (Sekou, min.46; Víctor), Olaza ('Kuki' Zalazar); Óscar Plano (Orellana, min. 46), Fede San Emeterio (Aguado, min. 32; Sergio Benito, min. 69), Toni (Roque Mesa, min. 69); Marcos André (Nacho Martínez, min. 46) y Weissman (Sergi Guardiola, min. 46).

1 - Rayo Vallecano: Luca Zidane; Balliu, Saveljich (Pathé Ciss, min. 44), Catena, Fran García; Óscar Valentín (Qasmi, min. 61); Nteka (Sergio Moreno, min. 74), Trejo (Comesaña, min. 61), Mario Suárez, Álvaro García (Bebé, min. 74); y Andrés Martín (Isi, min. 61).

Goles: 1-0, min. 7: Olaza; 2-0, min. 42: Weissman; 3-0, min. 51: Toni; 3-1, min. 71: Mario Suárez.

Árbitro: De la Fuente Ramos (comité castellanoleonés). Amonestó a Saveljich (18'), Joaquín Fernández (23'), Óscar Valentín (37').

Incidencias: Partido amistoso de la pretemporada 2021 correspondiente al XLVII Trofeo Ciudad de Valladolid disputado ante 5.684 espectadores en el Nuevo Estadio José Zorrilla.