Todo o nada

La gran realidad actual del Real Valladolid es que nadie contaba con la derrota (1-2) del pasado lunes ante el filial de la Real Sociedad. El equipo de José Rojo, Pacheta, patinó con fuerza en el encuentro en el Estadio José Zorrilla y, por ello, el encuentro ante la Sociedad Deportiva Éibar de este domingo obliga a buscar el máximo. Los blanquivioleta se juegan un alto porcentaje de sus posibilidades de ascenso directo en los 90 minutos del Estadio de Ipurúa.

Perder en la visita a tierras armeras significaría ver cómo se aleja el equipo de Gaizka Garitano y como los de Pacheta se tendrían que resignar a la disputa del play off de ascenso. Sin ser matemático, una derrota dejaría a los pucelanos muy lejos de poder terminar la temporada en los dos primeros puestos.

Con todo, lo de Éibar es un duelo decisivo, uno de esos encuentros que marca la diferencia y decide puestos finales. Para él, el Real Valladolid cuenta con todos los jugadores disponibles. Sólo con las bajas Óscar Plano, por lesión,  y Sergio León, por sanción, Pacheta viaja con 23 jugadores a tierras vascas.

Nombres propios

Con todos ellos, desde ElDesmarque Valladolid apostamos por un once sin grandes novedades y por la confirmación de quiénes son los jugadores importantes para Pacheta.

La titularidad de Joaquín Fernánadez, Jawad El Yamiq, Iván Sánchez, Gonzalo Plata, Toni Villa, Shon Weissman, Monchu Rodríguez o Roque Mesa define quién tiene un rol destacado en este equipo y quién no. Con todo y con ello, el Real Valladolid afronta el duelo de Ipurúa con la fuerza y la exigencia máxima.

Las fechas obligan a ese tipo de ambición. Con sólo cuatro partidos en el horizonte, el Real Valladolid no tiene tiempo ni puntos que perder y, por ello, afronta este encuentro con la exigencia y la necesidad por bandera. Ipurúa marcará lo que puede conseguir este equipo en relación al ascenso directo. Todo o nada.