Dos versiones para sumar un empate en Logroño
El Real Zaragoza salió al primer test serio de la pretemporada con la idea de mostrar el sello que quiere imponer Natxo González en su equipo. Mucha presión, solidaridad, ayudas... El técnico salió con un once que será la base que debute ante el Tenerife en Liga. Lo más destacado en los primeros compases fueron esas señas de identidad que propiciaron que el equipo se jugase en el campo del Logroñés.
No tardó Borja Iglesias en mostrar sus credenciales. A los 9 minutos llegaba la primera ocasión clara para los zaragocistas. Ángel tiró un balón largo al delantero gallego y el control que hizo fue el primer detalle que pudieron ver los aficionados que le tienen mucha fe al ariete. Le faltó definir ante la salida de Miguel Martínez, ya que cruzó demasiado el balón.
La siguiente acción peligrosa fue de Javi Ros, con un disparo desde fuera del área que tampoco encontro portería. El mediocentro navarro se mostró muy activo en la primera mitad y llegó en varias ocasiones a la portería del conjunto riojano. Minutos más tarde, Borja estuvo a punto de marcar a la salida de un córner, pero Miguel hizo una gran parada tirando de reflejos ante el buen cabezazo del punta gallego.
El partido se jugaba cerca del área del Logroñés. Hubo un par de acciones con peligro, con el sello de Papu y de Buff, que destilan calidad en los últimos metros. También hubo una gran combinación colectiva, que acabó Alberto Benito obligando a lucirse al meta rival. Pombo también probó a Miguel, pero su disparo lejano no cogió portería.
El marcador se abrió en el minuto 37. Papunashvili conectó con Borja, el delantero peleó el balón en el punto de penalti hasta que le llegó a Ángel para rematar de volea poniendo el 0-1 que merecía su equipo. El Logroñés tuvo una buena ocasión al filo del descanso, pero Ratón respondió con una gran intervención.
Natxo hizo cuatro cambios que afectaron sobre todo a la creación con la marcha de Buff y Papu, que eran los que marcaban la diferencia en los últimos metros. Febas y Xumetra salieron por ellos. También salió Eguaras por Zapater y Lasure por el goleador Ángel. El equipo mantuvo el tipo en los primeros minutos, aunque se llevaría un susto por parte del rival. La mejor ocasión fue un cabezazo de Simone Grippo a la salida de un corner en un remate que salió desviado.
El técnico hizo seis cambios a los 63 minutos manteniendo solo a Ratón en la portería. El equipo se resintió y las mejores llegadas fueron gracias a las conducciones de Febas y a su capacidad de ganar metros y acercarse con peligro a la portería rival. La ocasión más clara fue de Raúl Guti con un disparo desde fuera del área que desvió Sobrón y repelió el palo.
Cuando parecía que el partido estaba ya agonizando, falto de intensidad por parte de los dos equipos, llegó la jugada del gol del Logroñés. Dani Goméz fue derribado por Zalaya en una mala acción de los centrales. Muneta no perdonaba desde el punto fatídico y puso la igualada. Así acabó el partido. Una prueba más, con detalles importantes en la primera mitad y con muchas notas en la libreta de Natxo tras el bajón de la segunda parte.