Soro y Cani, estrenos paralelos
Del recital que dio el Real Zaragoza en el Carlos Tartiere ante el Real Oviedo, se extraen varias conclusiones muy positivas. Además de la goleada, la buena imagen y el regreso de Zapater, entre otros, uno de los goles blanquillos en el Tartiere tiene un significado muy especial. El tanto de Alberto Soro para cerrar el festín de goles es el primero del canterano con la elástica zaragocista en partido oficial. Pero no es lo único que hace especial a esta diana y Cani tiene que ver con ello.
Alberto Soro ya había dejado muy buenas sensaciones durante la pretemporada con el primer equipo. El canterano, que está entrando poco a poco en los planes de Imanol Idiakez, es una de las perlas de la cantera zaragocista. El técnico blanquillo lo sabe, por está tratando con mucho mimo al joven futbolista.
Su primer gol con la elástica del Real Zaragoza en partido oficial tiene muchas semejanzas con el estreno goleador de otro ídolo del zaragocismo como es Rubén Gracia Calmache, más conocido como 'Cani'.
El 'mago' de Torrero también anotó su primer tanto con la zamarra blanquilla en el Carlos Tartiere. Fue el 23 de marzo del año 2003 cuando el equipo aragonés visitó al Oviedo en la jornada 28 y aquel encuentro también terminó con triunfo zaragocista (0-2). Cani abrió el marcador en el minuto 15 del partido y Galleti remató la faena en el 90'.
Otra de las curiosidades que acompañan a esta coincidencia es que en la temporada 2002/2003, el Real Zaragoza ascendió a Primera división. Un final soñado para el equipo de Imanol Idiakez, que se quedó a las puertas del ascenso en el último curso.
Zapater, otra de las buenas noticias
Una de las mejores noticias que dejó el partido en el Tartiere para el Real Zaragoza fue el regreso de Zapater a la titularidad. Si ya sumaba minutos contra Las Palmas, el ejeano fue titular por primera vez ante el Real Oviedo.
Lo cierto es que el capitán blanquillo demostró estar en plenas condiciones. A lo mejor le falta un punto de ritmo, pero lo cierto es que el trabajo que realizó Zapater durante el encuentro fue innegable.
