Lalo Arantegui: "Sin tapujos, estamos peleando el descenso"
Lalo Arantegui compareció en la sala de prensa del Real Zaragoza para explicar la actual situación del club. Los blanquillos se encuentran en el 19º puesto de LaLiga 1|2|3, en descenso, y a ese respecto el director deportivo del club ha reconocido que, a pesar de ser un histórico cuyo lugar es la máxima categoría del fútbol español, su objetivo actual es la salvación.
En primer lugar, entonó el mea culpa: "El 100 de la responsabilidad es de la dirección deportiva. Desde que llegué a este club he tenido toda la libertad de tomar decisiones, siempre ha sido así y solo puedo asumir los errores cometidos. Vamos a poner todo nuestro esfuerzo en revertir esta situación, porque así lo han demostrado. Tratas de tomar buenas decisiones pero no todas son correctas. En la responsabilidad de mi cargo, podría haber hecho las cosas mejor."
"La expectativa ha sido muy alta desde el comienzo, la temporada es incluso más difícil que la anterior. Nunca he puesto excusas de nada ni me he escondido en situaciones difíciles. Con la responsabilidad y el cargo que tengo quiero transmitir... no tranquilidad, porque es una situación que nadie esperaba al principio de temporada, pero que a nadie le quepa duda que tanto el cuerpo técnico como los jugadores están sufriendo por esta situación, y se le va a dar la vuelta. El año pasado por estas fechas tuvimos situaciones similares a esta, pero también quiero pedir apoyo. Tenemos que saber dónde estamos, la Segunda división no es fácil, cada año que pasa va a ser más complicado, y es nuestro sexto año en la categoría" proseguía Lalo su comparecencia.
"Hemos creado una plantilla joven, la más joven de la categoría. Ojalá consiguiéramos un objetivo, no puede ser otro para el Real Zaragoza que la Primera división. Tenemos 30 jornadas para progresar". No obstante, el director deportivo no puso paños calientes al momento del equipo: "Hay que hablar sin tapujos: estamos peleando el descenso de la segunda división. Hablar de otra cosa ahora mismo es muy lejano. Ahora mismo estamos el descenso de categoría, y así nos tenemos que mentalizar ahí dentro. Los jugadores y todos, porque pensar en otra cosa no nos beneficia a nadie."
"Hay que hablar sin tapujos: estamos peleando el descenso de la Segunda división. Hablar de otra cosa es muy lejano."
"Dentro de la responsabilidad que tenemos, debemos salir aquí con la máxima humildad. Llevamos tres puntos de 24, A partir de aquí nos queda competir, ganar el primer partido y pensar que los jugadores ya han demostrado la capacidad que tienen y que le van a dar la vuelta a la situación. No sé por qué estaremos peleando en junio, pero ahora lo que me preocupa es el corto plazo. Mi máximo apoyo a los jugadores y el cuerpo técnico, que va a estar al 100 seguro hasta el 30 de junio, y no esperéis una revolución en el mercado de invierno, porque no es mi forma de trabajar."
La prioridad, recuperar anímicamente al vestuario
Sobre las causas, Arantegui habló de los momentos de forma: "En el fútbol hay una parte que son las dinámicas. Cuando un equipo duda de su capacidad, no tiene la misma confianza y pareces otro jugador: Hay que recuperar al vestuario anímicamente, pero también físicamente y a nivel de confianza, porque llevan dos meses igual. Si no hubieran demostrado cosas en el Zaragoza estaríamos preocupados, pero son buenos jugadores. Creo que la expectativa del año pasado se nos vuelve en contra, con ese inicio tan bueno que tuvimos. A este equipo no se le puede tachar de falta de actitud. Yo veo el día a día, es un grupo intenso, competitivo, honrado, hay un buen ambiente en el vestuario. Habrá jugadores más contentos que otros según jueguen más o menos. Es imposible reconocer a un equipo que lleva nueve partidos sin ganar. Nos cuesta mantener un estilo y un nivel, pero yo soy optimista. Hay varios jugadores que tienen que volver al equipo y le van a dar más opciones al míster."
Arantegui sabe que está en un club histórico, pero no piensa en un ascenso a largo plazo, sino en sacar al equipo del atolladero: "El objetivo del Zaragoza debe ser la primera división. Ahora, en la situación en la que estamos, no te puedo decir que vamos a ascender. Dime un objetivo a corto plazo. Ahora mismo me preocupan Tarragona y Mallorca. Creo que tenemos más recursos en la plantilla. Nos faltan jugadores que tienen que ser importantes. Ahora hay que tener paciencia, esperar que todos los jugadores estén disponibles y entonces, a final de temporada, hablaremos. Este proceso de un cambio de entrenador son 3-4 semanas hasta que se vea el rendimiento."
Por otra parte, no cree en girar bruscamente la forma de trabajar, sino en el trabajo diario: "El problema actual no viene solo con un partido. Hemos perdido una identidad que tenemos que recuperar. No hablo de sistemas tácticos. Recuperar la confianza del grupo no lleva un día ni dos. Ves el partido del otro día y jugadores que tienen unas características y no las pueden mostrar. No se arregla con charlas, se necesita ganar. Así la capacidad anímica del jugador se incrementa y podremos empezar a cambiar."
Prefiero no hacer comentarios.