Álvaro Giménez deja vivo al Huesca y la sequía en La Romareda se acrecienta

El Real Zaragoza volvió a perdonar y el Huesca de Nacho Ambriz se marchó con un punto valioso del feudo zaragocista en un derbi que fue superior el cuadro de JIM. Álvaro Giménez, el mejor del encuentro, que saltó en la segunda mitad fue el revulsivo del equipo y generó tres ocasiones clarísimas de gol. Dos postes uno de ellos de penalti y un cabezazo que salvó Andrés. Quinto empate consecutivo del cuadro zaragocista que sigue sin saber lo que es vencer en La Romareda.

Era el día D, día de derbi y la afición zaragocista no falló a la cita. Día previo al día del Pilar y todos los zaragocistas acudieron a La Romareda como si de una ofrenda a la virgen se tratara. El municipal rozaba las 30.000 almas antes del pitido inicial cuando ambos conjuntos saltaban, conscientes de la importancia de los tres puntos, así como con la motivación extra de un duelo como este.

El encuentro comenzaría muy trabado por las constantes faltas entre ambos conjuntos. El respeto entre ambos hacía que ninguno pudiera desplegar su juego ofensivo. Sería primero el conjunto de Nacho Ambriz el que a través del esférico empecerá a llegar a área rival. Apenas corría el minuto diez de encuentro, cuando llegaba el primer susto para los blanquillos en un un peligroso centro olímpico de Marc Mateu que ponía en alerta al guardameta argentino, que la desviaba lo justo para que se marchase por línea de fondo.

Tras esto, la afición blanquilla alentaba a los suyos y parece que surgía efecto. En cualquier perdida del conjunto oscense, los zaragocistas salían como balas a la contra y en una de estas llegaría la primera acción de peligro del cuadro de JIM. Vada cedía en bandeja para Nano Mesa que se quedaba en el mano a mano ante Andrés Fernández y su disparo se iba demasiado centrado. La linier levantaba el banderín y señalaba la infracción del canario.

A partir de aquí, el choque comenzaría a calentarse y en el minuto 23, Florian Miguel vería la primera cartulina del encuentro tras un agarrón a Bermejo, y por una previa entrada. A Hernández Maeso se le complicaría la situación y las recurrentes faltas y lances del juego se convertían en constantes protestas de ambos conjuntos. El Zaragoza, sin embargo, seguía a lo suyo y Eguaras bajaba a recibir para construir desde atrás, pero era complicado ante el buen posicionamiento táctico de los centrocampistas de Ambriz. Por la banda izquierda, llegaría el primer y único saque de esquina de los zaragocistas en la primera mitad.

El Huesca parecía más cómodo en el encuentro cada vez que avanzaban los minutos, aunque Ambriz vería como los suyos veían la segunda cartulina del encuentro. En este caso, era Escriche el que agarraba a Vada y evitaba la contra de los de JIM. El conjunto oscense hacía daño por la banda derecha y gozaría de la mejor ocasión del encuentro. Joaquín disparaba ante Chavarría, y el catalán taponaba el disparo, y este tocaba en el larguero de Cristian.

Por su parte, los zaragocistas también tenían la suya. Eguaras se inventaba un pase picado que controlaba Bermejo, y Nano Mesa, en fuera de juego, se la quitaba y disparaba de nuevo centrado. No daría para mucho más y colegiado del encuentro señalaba el fin de la primera mitad y ambos equipos se retiraban al túnel de vestuarios

El guion cambiaba y el Real Zaragoza metía una quinta marcha

La segunda mitad comenzaría con un doble cambio. En las filas oscenses entraba Cristian Salvador por Seoane, y por su parte, JIM quitaba a Nano Mesa y daba entrada a Álvaro Giménez. La segunda mitad comenzaba con un guion similar, aunque los hombres de Juan Ignacio metían una marcha más al encuentro y esa marcha más se vio reflejada en la doble ocasión blanquilla.

Buen centro de Chavarría para Álvaro Giménez que remataba de cabeza y la salvaba Andrés Fernández, que la mandaba a córner. En la salida del córner, el esférico le caía al borde del área a Eguaras y este la rompía, pero volvía a lucirse Andrés Fernández para salvar al Huesca.

Ahora era el turno de los oscenses, que lo intentaban en una contra peligrosa comandada por Escriche que no sabía parar Zapater, y era Mikel Rico, el que la terminaba con un disparo que se marchaba muy desviado de la meta de Cristian.

Avisaría, de nuevo, el Real Zaragoza, que ahora sí, estaba mucho más enchufado que el Huesca volvía a perdonar. Álvaro Giménez la controlaba con la tibia y el disparo con su pierna izquierda se topaba con el poste izquierdo de la meta de Andrés Fernández. A Nacho Ambriz lo le gustaba lo que veía y metía un nuevo cambio. Se retiraba del terreno de juego Joaquín y entraba Ferreiro.

JIM también movía ficha e introducía un nuevo cambio. Entraba James Igbekeme y se retiraba Valentín Vada. En el minuto 84, llegaría una jugada clave del encuentro. Álvaro Giménez recibía una falta en la línea del área y Maeso tras pitar falta fuera del área corregía su decisión tras consultar con el VAR.

Se le terminaba al tiempo al cuadro de JIM que veía como no podía, de nuevo, perforar la meta de su rival y el alicantino metía un triple cambio. Azón entraba por Zapater, Petrovic por Eguaras y Adrián por Bermejo. Hernández Maeso señalaba cinco minutos más de añadido, pero nada más ocurriría y el derbi se terminaría con el 0-0. Punto que sabe más a los oscenses que a los zaragocistas.