Un portero de luces y sombras: Poussin y su tétrico inicio en el Real Zaragoza

La resaca que dejó el empate (2-2) del sábado continúa. El modo en el que se le escaparon al 2 puntos al Real Zaragoza fue cruel por el fallo y por el tiempo en el que se dio. Dos días después, el protagonista sigue siendo Gaëtan Poussin.

Tras la lesión de Cristian Álvarez ante el Andorra FC, el momento que llevaba esperando Poussin desde que firmó por el Real Zaragoza llegó. Supo que era el momento de demostrarle a todos por qué Juan Carlos Cordero apostó por él en verano. Pero lo cierto es que su inicio en el club aragonés es para olvidar. En apenas 2 partidos ha cometido tres errores que han tenido como deselance tres goles de los equipos rivales. Si bien contra el Alcorcón salió como uno de los señalados, en Gijón fue el gran señalado.

Pero lo cierto es que viendo los antecedentes del guardameta francés era algo que podía pasar. Gaëtan es un portero de luces y de sombras -aunque de momento lleve muchas más sombras que luces-, tal y como reflejó el otro día en El Molinón en apenas 98 minutos. El '13' del Real Zaragoza tuvo una actuación más que correcta -atento a balones aéreos y con paradas de mérito bajo los palos- hasta el gol que regala a Insua, pero el fallo echó por tierra todo lo hecho hasta ese instante.

Las últimas temporadas en Francia evidencian su irregularidad: buenas actuaciones como la de su debut o el año pasado ante el SM Caen acreditan al galo como un portero apto para la categoría, pero los errores también le acompañan y ensombrecen su figura. Varios ejemplos de tenemos de ellos, como los que ha cometido este año o como los que perpetró hace dos temporadas ante el Olympique de Lyon, en el que falló con el juego de pies y en el juego aéreo, y ESTAC Troyes, en el que no pudo parar un penalti en el que adivinó la trayectoria y terminó en autogol.