Víctor Fernández, la salvación y las bajas para el Tartiere: "Son exageradas"
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El técnico incide en la importancia de los puntos para alejarse del peligro
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No hace cuentas y solo piensa en ganar en Oviedo
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El Real Zaragoza buscará alarga su racha fuera de casa en el Carlos Tartiere
Víctor Fernández ha señalado que frente al Real Oviedo, su rival del próximo domingo, espera que su equipo se levante del varapalo que supuso la derrota contra el Burgos y que sea capaz de dar su mejor versión en busca de tres puntos que acaben con la incertidumbre sobre los puestos peligrosos de la clasificación.
"El partido contra Burgos lo perdimos nosotros y hemos trabajado para que no se repitan los errores que cometimos entonces. Espero que nos volvamos a levantar como hemos hecho otras veces y que demos nuestra mejor versión contra el equipo asturiano", ha destacado en rueda de prensa.
Igualmente ha resaltado que la presente semana ha sido más complicada que las anteriores "por la bofetada del calibre que recibimos frente al Burgos. Te cuesta arrancar, el ánimo no es el mismo al inicio de la semana aunque luego va mejorando y el tema médico no ha sido bueno. Hemos vivido una serie de adversidades que hacen que la semana haya sido diferente y lo tenemos que afrontar con profesionalidad y rigor", apuntó.
Por ello, ha explicado que desde el martes sabe con quién puede y no puede contar y que eso condiciona el plan estratégico de partido contra el Oviedo. A este respecto ha señalado que sólo recupera a Quentin Lecoeuche pero que con Víctor Mollejo prefiere ser prudente y no correr riesgos mientras que no es optimista con Francho Serrano. "A todos nos gustarían contar con todos los efectivos para luchar de tú a tú en la batalla pero esto es el deporte. También entiendo que los rivales tendrán bajas aunque las nuestras son exageradas, afectan a determinadas líneas y me dan problemas para confeccionar la alineación", ha lamentado.
Aun así el técnico zaragozano tiene claro que con los jugadores de que dispone van a tener opciones de ganar pero poniendo "el rigor, la atención y concentración decisiva en las vigilancias que no tuvimos frente al Burgos, que fueron inexistentes, y una actitud competitiva firme y sólida ante un claro candidato al playoff".
La permanencia
El preparador blanquillo se ha sincerado y, aunque ya desde su llegada explicó que lograr la permanencia iba a ser duro, ha subrayado que lo está siendo "todavía más" por el tema de las lesiones que está arrastrando el equipo. "Se nos ha complicado más porque desde que llegué hay jugadores con los que no he podido contar y que son importantes aunque no quiero que sirva de excusa. Eso complica algo más a la hora de tomar decisiones pero sigo siendo igual de optimista que el primer día y pienso que los sacaremos adelante aunque sea con mucho sufrimiento", ha subrayado.
Además, señaló que al equipo le cuesta marcar y que hay un reparto de goles pero que no cuenta con una pareja de jugadores que puedan aportar diez u once goles cada uno y que, por ello, tienen que ayudar todos en esa faceta. "Hay que ir a por todas con lo que tenemos. Hay jugadores muy valiosos que apenas han jugado, no conmigo sino con los anteriores entrenadores, y si lo hubieran hecho entonces, seguramente, yo no sería el entrenador sino que lo serían Escribá o Velázquez", ha explicado.
Preguntado por si una victoria en Oviedo podría suponer la salvación ha declarado que no sabe si con un triunfo más sería suficiente pero que una victoria más si que es "imprescindible".