Álvaro Morata pasa página tras su separación con Alice Campello como líder del Milan
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Álvaro Morata es una referencia en el Milan a pesar de ser un recién llegado
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Aún tiene la asignatura pendiente de aumentar sus goles
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Alice Campello y la supuesta imposición a Álvaro Morata: "Lleva nueve años sin cenar con sus padres"
El pasado verano supuso un carrusel de emociones para Álvaro Morata, que pasó de ganar la Eurocopa como capitán de la Selección Española a dejar el Atlético de Madrid por el Milan tras asegurar que seguiría como rojiblanco. Todo ello además, compaginado con su separación de Alice Campello siete años después de su boda y con cuatro hijos en común. Sin embargo, en Lombardía ha vuelto a encontrar la estabilidad.
El madrileño ha caído de pie en Milán, donde lidera la ofensiva de los 'rossoneri'. Dos goles y una asistencia, pero mucho trabajo importante que los números no reflejan. Se ha convertido en una solución constante en la táctica milanista, pero también en una referencia de vestuario, en el líder que tanto pedía la afición.
Desde su llegada a Milán, Morata ha sido la pieza clave del luso Paulo Fonseca junto al estadounidense Christian Pulisic, siempre que las lesiones se lo han permitido. Es un jugador renovado, con confianza, con acierto en sus decisiones y decisivo en los momentos importantes.
El madrileño llegó tocado y forzó para jugar la primera jornada de la Serie A, volvió a forzar para llegar al duelo ante el Liverpool de Liga de Campeones y solo pudo jugar media hora ante el Bayer Leverkusen en la misma competición por los esfuerzos producidos, pero en todos los partidos que ha jugado ha salido siempre reforzado por su entrega, por sus buenas decisiones y por su compromiso, alabado por el milanismo constantemente.
Referencia ofensiva, líder de vestuario
Aunque todavía está sin estrenarse en Champions, competición en la que no marca desde el pasado 7 de noviembre, ha sido la voz para con la afición en los momentos de mayor tensión. Ha asumido los galones en un vestuario en ocasiones desprovisto de líder, pero siempre con humildad para no generar controversia dentro del mismo.
"Trabajar, trabajar y trabajar. Eso es lo que tenemos que hacer. No es un problema de planteamiento, de táctica. El fútbol es así. Igual que hemos encajado podíamos haber marcado. Tenemos que trabajar, cambiar como reaccionar tras los goles", dijo tras el partido, en unas declaraciones muy aplaudidas por su afición.
"Theo Hernández es un líder, Rafa Leao es un líder. Hay muchos jugadores muy buenos en el equipo", comentó sobre ser un referente del vestuario nada más llegar.
Pocos días después, el Milan se repuso del varapalo de la derrota ante el Liverpool con una victoria balsámica ante el Inter, en la que Morata volvió a dejar grandes sensaciones pese a que no marcara.
Álvaro Morata, con menos gol y más pase
Esa es la evidente cuenta pendiente de Morata esta temporada: la falta de gol. Sin ir más lejos, la pasada campaña acumulaba ya siete dianas. Eso sí, en Italia, sus apariciones han sido decisivas.
Primero contra el Torino, partido en el que salió de suplente para marcar y empujar hacia un empate 'in extremis'. Su segundo y último tanto has el momento, el pasado 27 de septiembre, descorchó la botella ante el Lecce, partido que acabó en goleada.
Sin embargo, ha conseguido compensar esa falta de gol, que aún así todavía le exige un Milan necesitado arriba, con una nueva faceta del madrileño, mucho más participativo en la base de la jugada, más acertado en el desarrollo de los contragolpes y actor principal en la construcción de las acciones de peligro.
Suya fue la asistencia del gol que marcó el Milan al Liverpool. Y acumula un 85% de pases en Liga de Campeones, según las estadísticas de la UEFA.
Datos que no terminan ahí. En los 113 minutos que ha disputado en 'Champions', ha completado 25 pases de los 28 que ha intentado. De los 18 que ha intentado en media distancia, 16 fueron con éxito. Y con una 100% de efectividad en los que hizo en largo.
También se ha erigido como un jugador importante en los planteamientos defensivos. Ejecuta las presiones con inteligencia para comprometer la salida del rival y, sin ir más lejos, ante el Udinese fue clave cuando su equipo se quedó con 10 en la primer amitad, doblando esfuerzos en defensa para mantener el marcador y certificar la victoria.
El Brujas, rival maldito para Morata
Ante el Brujas, Morata intentará poner fin a su sequía particular en Liga de Campeones, en la que marcó por última vez el 7 de noviembre de 2023, ante el Celtic -en fase de grupos de una competición en la que llegó a cuartos de final-, en un duelo en el que anotó por partida doble.
Sin embargo, sus precedentes contra el equipo belga no son alentadores: ninguna victoria en los dos partidos que ha jugado contra el combinado negriazul. Ambas fueron recientes, en la fase de grupos de la Champions 2022-23.
En el duelo de ida, en el Jan Breydel Stadion, perdió 2-0. Jugó 65 minutos. En el de vuelta, en el Metropolitano, empató a cero en un duelo en el que fue suplente y jugó media hora.
Pero con la camiseta del Milan, Morata es un jugador renovado. Ahora es un líder reconocido tanto por el vestuario como por la grada. Se siente importante por que es importante en el equipo. Su papel como delantero facilita las ofensivas de su equipo. Le falta una gran noche de Champions para convertirse en el delantero que el Milan tanto necesita.
