La "carne de gallina" de Emery al escuchar a la afición del Sevilla

Está previsto que alrededor de 20.000 sevillistas copen las calles de Madrid en la previa de la final de la Copa del Rey. Un desplazamiento masivo, pese a que al menos 5.000 aficionados no podrán entrar al Vicente Calderón al no tener entrada para la cita. Unai Emery espera una fiesta en la grada, como ya vivió en Basilea. De hecho, se ha mostrado "impresionado" por la animación de los suyos, y ha puesto como referencia la final de la Copa de 2007 ante el Getafe, donde la hinchada nervionense dio una exhibición en el Bernabéu:

"En el camino hemos dejado muchas cosas, mucho trabajo. El mes de enero fue muy duro. En una competición como es la liga, en 38 jornadas, que es el principal medio donde puedes conseguir los objetivos, suplantar eso con otra competición es muy difícil. En el camino te puedes quedar. Eso son la Copa del Rey y la Europa League. Hemos conseguido suplantar esa regularidad y credibilidad gracias a la Europa League y a la Copa. Ha sido muy duro, y hasta no conseguirlo en Febrero que sabíamos que teníamos una final ahora, y hace os semanas ante el Shakhtar... El ganar te hace que tú adquieras credibilidad, aunque no sabes si ganarás la final. No podemos decir que no nos interesa la Copa por haber ganado la Europa League, porque estaríamos equivocados. Es una oportunidad tremenda, muy difícil de volver a igualar. La oportunidad que tenemos hemos de ir a por ella. Los aficionados tienen esa satisfacción, de todo ese camino que hemos sufrido, incluso con connotaciones negativas como no ganar fuera de casa, que se han sustituido con todo lo conseguido. Pero tenemos la oportunidad de ganar otro título. Si se desplazan 20.000 sevillistas, hay que disfrutar. Luego podrás ganar o no, pero se nos tiene que poner la carne de gallina cuando veamos a los aficionados cantar el himno y las otras canciones coo el Basilea. Y eso lo viviremos en otra final, ante un Barcelona que es el favorito que necesita ese título para su credibilidad. Pero la nuestra también está mañana. Desde el mes de enero que salimos de Balaídos en un día lluvioso con una final bajo el brazo. Que encima has ganado una ya, por su puesto, pero mañana tenemos otra y queremos ir con todas nuestras fuerzas a por ella. Y tenemos fuerzas. Ahora bien, el Barcelona es el favorito".
En este sentido, siguió mostrando su admiración:  "También se lo he dicho otras veces y no hemos conseguido reaccionar. Hay muchos momentos con los futbolistas, de dificultad, donde uno recoge el otro al hombro y lo lleva hacia adelante, recogiendo al herido y llevándolo a sanar. En esta temporada ha habido momentos donde hemos pasado dificultades, y estta final tiene connotaciones qeu trasciende mucho más allá. Es mérito del equipo. Vuelvo a insistir, en el Sánchez-Pizjuán nos hemos sentido muy fuertes, y fuera de casa no hemos encontrado esos equilibrios. El otro día el campo no era ni suyo ni nuestro. Yy la afición tuvo un papel brutal. Yo suelo ver los partidos resumidos sin sonido ambiente. Ppero el otro día pude comprobar con el ruido ambiente es que era espectacular escuchar y sentir cómo estaba el campo, cómo se escuchaba a los sevillistas. Había un halo de fuerza que nos hizo dar lo mejor de sí y poder remontar el partido. Yo lo traslado, si había 5.000, y mañana 20.000, tiene que ser impresionante. Yo viví una final de Copa, un Sevilla - Getafe en el Bernabéu, como neutro, y fue espectacular lo de la afición del Sevilla. Para el futbolista tiene que ser tremendo, hay que jugar con la cabeza fría".
Un Unai que quiere que toda la energía del sevillismo y de su equipo gire en torno a esta final, ahora que se terminó la europea: "Esperaremos al día de mañana para saber cómo están. El proceso de todos es como para que van a estar. Luego hay dos maneras de verlo. Lo planteamos y yo insistía. Hablábamos de dos finales, y estamos repartiendo por igual la energía. Había que darle prioridad primero a la primera, no quería que nadie hablase de la  Copa de Rey. Que nadie me hable de camisetas, del balón, del entrenamiento... Todo por trasladar toda la energía al partido de  Europa. Ahora bien, una vez terminado, toda la energía que tengamos hay que recogerla y desde el pensamiento único de la final de la Copa del Rey. Quién sabe si yo voy a tener otra vez otra oportunidad de jugar una final de Copa del Rey, los jugadores lo mismo. Encima que hemos sacrificado muchísimo del camino. Sin saber que íbamos a llegar a la final hemos tenido que luchar muchísimo por esta Copa, por lo que no podemos pensar que no tiene importancia. Si se desplazan 20.000 aficionados, nos debemos a ellos. Para ellos es un día festivo, pero para nosotros es de trabajo".