El 'método Monchi' capta la atención de The New York Times
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Monchi hace crecer el valor de la plantilla hasta los 315 millones
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El primer reconocimiento del sevillismo al trabajo de Monchi
Monchi regresaba hace unos meses al Sevilla FC para protagonizar su segunda etapa como director deportivo del conjunto nervionense. Un hecho que ha levantado una gran expectación no sólo en el sevillismo, sino más allá de las fronteras españolas. Hasta el prestigioso periódico norteamericano 'The New York Times' ha puesto sus ojos en el trabajo del isleño.
En un amplio reportaje, titulado "la ciencia del mercado de verano en el fútbol', el diario detalle la forma de trabajar de Monchi con el que conversa para conocer su método. "¿Puede un club vencer al mercado año tras año? El Sevilla lo hace confiando en la exploración extraordinariamente profunda y en un hombre muy inteligente con un teléfono", explica el texto.
El reportaje ha sido publicado este viernes, aunque el encuentro del periodista con Monchi se produjo hace algunas semanas. Curiosamente fue cuando el Sevilla cerraba la marcha de Luis Muriel al Atlanta. La información detalla cómo Monchi vive permanente pegado al móvil y cómo su teléfono no para de sonar y de recibir mensajes relacionados con su trabajo.
"Hay un flujo constante de llamadas, pero un torrente de mensajes, principalmente en WhatsApp...no pueden imaginarse al día con el volumen de mensajes que recibe. Para cuando escribió una respuesta, otra docena ha llegado", señala el reportaje.
Ventas
También se alaba la figura de Monchi, de la que se recuerda ventas como las de José Antonio Reyes o Sergio Ramos, así como fichajes como el de Dani Alves. "Se ha forjado una reputación como uno de los buscadores de talentos más rápidos y los mejores negociadores en el fútbol", apunta el reportaje en referencia al director deportivo del Sevilla.
"Hay docenas de historias de éxito, afirmaciones de fama. Algunos jugadores, como Ivan Rakitic, Julio Baptista y Clément Lenglet, fueron comprados baratos y vendidos a un precio alto, con Sevilla como un peldaño en el camino hacia una de las superpotencias de Europa", indica el artículo de The New York Times que recuerda los títulos del equipo.
La experiencia de la salida de Ramos para afinar el método
Monchi recuerda el episodio de la marcha de Sergio Ramos que acabó con la llegada de Ivica Dragutinovic, algo que hizo sobre la marcha y que le sirvió para plantear métodos de trabajo. "Teníamos que aprender que tenemos que trabajar más, mirar en todas las posiciones, para que nunca vuelva a suceder", dice el director deportivo.
El reportaje, igualmente, esboza cómo la dirección deportiva encabezada por Monchi reparte las tareas y competiciones para los ojeadores, la clasificación de los jugadores vistos por posiciones y los tiempos durante el año. "Cada jugador explorado recibe una calificación, que va desde A (firme ahora) hasta D (un pase suave pero firme). Cualquier persona que clasifique A o B está sujeta a un análisis más detallado en vídeo", relata el reportaje.
Y comenta algo de porqué pese a ese red de scouts y ojeadores y WhatsApps tiene que llamar a un jugador comprometido con el Betis al llegar al aeropuerto de Sevillame parece un bluff la entrevista la verdad
Lucas, en referencia a tu comentario - no, ninguna alusión a sus dos años en la Roma.
Comenta algo en el artículo sobre su estancia en la Roma y el porqué de su "no triunfo"?
Acabo de leerme el artículo entero en el New York Times. Brutal. Fascinante escuchar como trabaja el equipo de Monchi. Me ha parecido particularmente curiosa la historia sobre Joao Felix. En su momento, la prensa habló de que lo ofrecieron al Sevilla el año pasado pero lo desecharon por no tener clara la proyección del joven jugador. No obstante, el artículo explica algo distinto. He traducido el extracto. "Esto no es, dice Olivera, fantasy soccer. Está ajustado a nuestra realidad financiera. Por ejemplo, el ojeador sevillista de la liga portuguesa se fijó en João Félix, la última joven joya de ese país y que jugaba para el Benfica la última temporada. Se vio muy claro, bastante rápido, que grandes clubes con mucho dinero lo querrían, y por eso el Sevilla lo omitió del equipo ideal a reclutar."