Visto lo visto en años posteriores, tuvo suerte el Sevilla FC con el comportamiento de Samir Nasri durante la temporada que vistió la camiseta blanquirroja, la 2016/17, en la que dio un buen rendimiento especialmente en la primera parte. Desde entonces, sus aventuras en el fútbol van de escándalo en escándalo.
La última tiene que ver con el confinamiento debido a la crisis sanitaria del coronavirus, que el galo está pasando en Dubai a pesar de que juega en estos momentos para el Anderlecht belga, al que llegó el pasado verano libre tras pasar sin pena ni gloria por el West Ham United de la Premier League inglesas.
Pues bien, en el histórico club belga no tienen noticias de su futbolista y únicamente saben que se encuentra en Dubai, tal y como indica el periódico Derniére Huere. El Anderlecht ha monitorizado los entrenamientos de su plantilla en momentos de cuarentena, aceptando los futbolistas enviar informes desde sus casas, pero Nasri no ha respondido y prácticamente está ‘desaparecido’ para el club que le paga.
Se descarta que Nasri haya sufrido algún percance, pues ha compartido alguna publicación en sus cuentas de las redes sociales, siendo la última noticia que tiene el Anderlecht de él.
The Goat 🐐 https://t.co/J9cVo1e7sd
— Samir Nasri Official (@SamNasri19) April 14, 2020
Lo que parece claro es que el Anderlecht no va a renovar el contrato de Samir Nasri, que expira el próximo 30 de junio. Ha jugado ocho partidos y marcado dos goles, pero entre las lesiones –no juega desde octubre- y este último acto de indisciplina, está sentenciado a tener que buscar otro club a sus 32 años.
Tras salir del Sevilla una vez que expiró el contrato de cesión con el Manchester City, Nasri fue traspasado al Antalyaspor turco. A principios de 2018 fue sancionado por la UEFA por un año y medio por someterse a un tratamiento intravenoso en una clínica de Los Angeles, algo que hizo mientras era sevillista. Cuando expiró la suspensión fichó por el West Ham, con el que apenas jugó, y ahora forma parte del Anderlecht, aunque será por poco tiempo.