Los dos paradones redentores de Vaclik que salvaron un punto
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Hay dudas entre el sevillismo sobre si Tomas Vaclik falló o no en el gol de Kiko Olivas para el Real Valladolid. Unos creen que el portero del Sevilla FC ‘cantó’ y otros que el error fue defensivo y que el remate del jugador blanquivioleta era imparable, un golazo. Pero en lo que todos coinciden es en que, al final, el cancerbero checo salvó al equipo con dos intervenciones de mérito.
En el penúltimo minuto, Diego Carlos y Joan Jordán no se entendieron y Rubén Alcaraz se plantó solo ante él. El pucelano chutó a bocajarro y Vaclik no se amilanó, sacando una mano salvadora para evitar lo que habría sido una catástrofe.
Poco después, el Valladolid la volvió a tener, esta vez por medio de Enes Ünal. Casi en la última ocasión del partido, el delantero turco chutó desde la frontal en un disparo envenenado que Vaclik desvió a saque de banda. Dos paradas salvadoras que enmiendan su error en el primer gol. Si es que lo hubo.
El cuarto empate cedido, así no se si se conseguiran los objetivos. Demasiados puntos perdidos, la ventaja inicial, se diluye y el cuarto puesto se ha puesto mas caro. El Sevilla salió sin concentración. ni intensidad, el Valladolid, si tuvo concentración e intensidad, lo que le permitió adelantarse en el marcador gracias tambien a la inactividad de Vacklic, portero al que considero insuficiente para un equipo con aspiraciones. En fin, se han perdido otros dos puntos, que seguro, se echaran de menos.