Pocos han visto jugar a Diego Armando Maradona con los colores de su equipo, pero los hinchas del Sevilla FC sí disfrutaron durante una temporada del astro argentino vistiendo la camiseta blanquirroja, que se enfundó por primera vez hace justo 28 años.
Este lunes se ha cumplido el vigésimo octavo aniversario del debut del astro argentino con el equipo blanquirrojo en el Ramón Sánchez-Pizjuán. Tras año y medio sin saltar a un terreno de juego por la sanción que sufrió por doping cuando todavía jugaba en el Nápoles, Maradona volvió a vestirse de corto precisamente ante el Bayern de Múnich en un partido amistoso. Aquel día los sevillistas, dirigidos por Carlos Salvador Bilardo, ganaron 3-1 al conjunto alemán, el mismo con el que disputó la Supercopa de Europa hace apenas unos días. Cómo hemos cambiado.
El debut en partido oficial con el Sevilla se produciría días después en San Mamés. El 4 de octubre de 1992 Maradona, con el diez a la espalda y el brazalete de capitán, comandaba un equipo en el que también se encontraba el hoy actual entrenador del Atlético de Madrid, Diego Pablo Simeone. El Sevilla perdió aquel encuentro po 2-1, pero el partido pasó a la historia por el debut del que muchos consideran el mejor futbolista de todos los tiempos con la camiseta del Sevilla en partido oficial.
Tres días después, el argentino jugó su primer duelo oficial en el Sánchez-Pizjuán y marcó el gol de la victoria ante el Real Zaragoza. Este partido dejó otra imagen de para la historia. Cuando se dirigía a la esquina del campo para lanzar un córner, Maradona levantó al público de sus asientos tras golpear un par de veces una bola de papel de aluminio y echarla del terreno de juego con la espuela.