Munir El Haddadi ha pasado un verano difícil y complicado. El internacional marroquí supo desde el primer momento por parte del Sevilla que no contaría con muchos minutos. A esas alturas de mercado la competencia iba a crecer y efectivamente ha subido con creces. Eso motivaba una salida de Munir a otro equipo. Su traspaso, la fórmula ideal para el Sevilla, reportaría un importante margen de beneficio, después de que el jugador llegara a Nervión en el invierno de 2019 a cambio de un millón y medio de euros. Casi libre.
Sin embargo, el verano ha pasado y Munir se ha quedado en el Sevilla. Hasta Luuk de Jong se ha marchado antes que él. Desde el primer momento, el jugador apostó por continuar en el equipo y no veía con buenos ojos marcharse. Con el paso de las semanas fue vinculado con equipos como el Alavés, el Valencia o el Southampton, pero finalmente no hubo nada.
Ahora, Munir tiene ficha para LaLiga y la Champions. Se ha convertido prácticamente en el tercer delantero del primer equipo, siempre y cuando Lopetegui no ponga por delante a Iván Romero del filial. Y es que desde el mes de marzo Munir no tiene participación en LaLiga con el Sevilla. Su presencia en el equipo ha pasado a un segundo o un tercer plano. No juega desde la jornada 31 de la 2020/21, en la que salió desde el banquillo en el 89’ ante el Levante. Incluso se quedó fuera de las listas de 23 en alguna ocasión durante el tramo final de la pasada temporada.
Está por ver si el devenir del mercado y permanencia en el equipo motivan lo suficiente al futbolista.