El Sevilla FC ha conseguido aumentar el valor de su plantilla en la última ventana de fichajes. Pese a que Monchi afirmó en rueda de prensa no estar al cien por cien satisfecho con el resultado, lo cierto es que el club hispalense ha vuelto a ser uno de los grandes animadores del mercado en LaLiga Santander. Sin embargo, el gran talón de Aquiles de la dirección deportiva rojiblanca han vuelto a ser las salidas, sobre todo la de un futbolista que finalizará próximamente su contrato: Ibrahim Amadou
El centrocampista galo llegó a Nervión por cuatro temporadas a razón de unos 14 millones de euros. El que fuese capitán del Lille francés ha tenido un paso poco más que testimonial por la capital andaluza. Amadou se ha marchado cedido en hasta tres ocasiones. Esta temporada no ha podido encontrar equipo, y el futbolista ya aguarda al mes de enero para poder negociar libremente.
Otro de los futbolistas que cumple contrato la próxima campaña es el canterano Javi Díaz. El portero es asiduo en las convocatorias de Julen Lopetegui, pero la irrupción de Alfonso Pastor, recientemente renovado, complica su continuidad en el club.
Cuando Monchi firmó en 2019 a un futbolista brasileño de 31 años que militaba en la liga turca, pocos iban augurar que tres años después, y ya con 34, una de las prioridades del club sería acometer su renovación. Lógico, pero es que Fernando Reges se escapa precisamente de toda lógica. El excelente nivel del todocampista rojiblanco le va a permitir, salvo catástrofe, ampliar su vinculación con el Sevilla. Fernando cumple contrato en junio de 2022, pero tanto jugador como club están por la labor de acometer una renovación próximamente, por lo que su situación contractual no preocupa en las oficinas del Sánchez-Pizjuán.
Desde que Julen Lopetegui llegase a Sevilla, la política sevillista ha cambiado levemente la dirección estipulada. La entidad hispalense es y seguirá siendo un club vendedor, pero ahora tiene la capacidad de poder mantener el bloque. Y en busca de eso, el área deportiva debe revisar contratos de los pilares de la plantilla. El que más urgencia corre es el de Joan Jordán. El mediocentro catalán cumple contrato en junio de 2023.
Pese a la gran competencia que hay actualmente en su posición, Jordán cuenta con un rol protagonista en el equipo. De hecho, es el primer jugador de la 'era Lopetegui' que ha alcanzado los 100 encuentros. Jordán seguiría los pasos de Diego Carlos y Lucas Ocampos, quienes sellaron sus renovaciones en el pasado mes de junio.
Distinto es el caso de Joris Gnagnon. El francés tiene contrato hasta 2023, está sin dorsal y se espera encontrarle una salida en el próximo mercado de invierno. Tanto es así que tampoco se descarta una hipotética rescisión del contrato. Otros futbolistas que han perdido protagonismo y que podrían salir en el próximo verano son Nemanja Gudelj y Munir. Ambos finalizan contrato en junio de 2023, cuentan con mercado y podrían dejar ganancias en las arcas del club.
Estos días veíamos a Monchi en Egipto desconectando de su frenética actividad laboral. No obstante, a su vuelta de las vacaciones tendrá que ponerse de nuevo manos a la obra para esclarecer la operación salida.
Amadou jugó en defensa de 3 con bloque bajo, nada que ver con la presión que propone Lopetegui. Para mi gusto aún así no da el nivel para jugar en el Sevilla al igual que Gagnon, unos fichajes que ya en su día se pagaron por encima de su precio real de mercado. Ese año no se acertó en ningún fichajes bajo la dirección técnica de Caparros. Gnagnon, Amadou, Rog, Wober, Aleix, Gonalons, Promes,...
Cuando llegó Amadou, recuerdo que se lesionaron varios centrales y él los sustituyó muy bien. Los entrenadores son maniáticos y les dan por unos y rechazan a otros sin saber porqué. A Emeri le pasó con Aspas. Ante la falta de centrales yo creo que Amadou se podría haber quedado.
Exacto Rosendo, no tienes ni idea.
Espero que no ocurra con Amadou o Gnagnon como pasó con Kune, que aquí no valia y en el levante se salió marcando goles, de tal modo que lo vendió por una millonada al futbol ingles y , posiblemnte yo no sepa nada de futbol, porque no entiendo estas situaciones pue3s cuando se ficharon por algo sería no creo que fuera un capricho o por cobrar unas comisiones el fichador. Creo que un entrenador que no sea capaz de hacer jugar a un jugador no me merece mucha confianza.