Las cuentas del Sevilla para acabar primero... o seguir segundo

Con tres puntos en tres partidos, el Sevilla sigue sin conocer la victoria en la Champions League 2021-22. Eso ha permitido a un rival que iba de tapado, el Salzburgo, destacarse como líder del Grupo G con 7 puntos, cuatro más que el equipo de Julen Lopetegui. Los nervionenses han perdido una gran oportunidad en Lille de seguir el ritmo de los austriacos, a los que tendrá que visitar en la última jornada. Pero todavía no abandonan la idea de poder quedar primeros.

¿Qué necesita el Sevilla para ello? Para empezar, vencer a Lille en el Ramón Sánchez-Pizjuán el martes 2 de noviembre y estrenar su casillero de triunfos. Además, que el Salzburgo al menos no gane en casa del Wolfsburgo, al que este miércoles le endosó un 3-1 en su estadio. Si ganan los sevillistas y los alemanes, la clasificación se apretaría y sólo habría un punto de diferencia entre ambos con dos partidos por jugar aún, uno de ellos ese final Salzburgo-Sevilla. Si ganan los andaluces y también lo hace el Salzburgo se complicaría el primer puesto pero se despejaría el segundo, que también da la clasificación para los octavos.

El objetivo de los nervionenses no es otro que, al menos, llegar con opciones a esa jornada final. Y para ello tiene que dar buena cuenta tanto del Lille como del Wolfsburgo, que también aprovechó el mal momento del Sevilla para frenarlo en Alemania. Esas dos victorias, salvo que el Salzburgo también sume seis puntos, abrirían la puerta del primer puesto. Un objetivo decisivo si quiere plantarse en los octavos con más opciones de colarse en los cuartos. Si no, le esperará un primero de grupo y ya se sabe cómo suele acabar eso.

Pero no sólo debe encontrar la victoria el Sevilla mirando hacia arriba sino también hacia abajo. Si el Lille consigue salir airoso de Nervión se convertirá en un rival peligroso para la segunda plaza, que ya se convertiría en el objetivo casi exclusivo de los de Lopetegui. Los franceses tienen dos puntos, como el Wolfsburgo, al que visitarán en la última jornada. La próxima jornada puede ser decisiva en el desenlace final.