Jugar bien o no jugar bien, 'that's the question'
“¿Qué es jugar bien?, dices mientras clavas en mi pupila tu pupila azul. ¿Qué es poesía? ¿Y tú me lo preguntas, Sevilla? Jugar bien… eres tú”. Hoy me he levantado literato -modo protoprincipiante-, y entre la ‘reinvención’ a lenguaje Lopeteguiano de la Rima XXI de Gustavo Adolfo Becquer y de la celebérrima introducción del Hamlet de William Shakespeare, me da para un alegato en favor de la performance del actual segundo clasificado de LaLiga Santander, el Sevilla FC de Julen Lopetegui.
El Sevilla de Lopetegui son cuatro palabras que resonarán en la historia del club durante la eternidad. Como el Sevilla de Ramón Encinas, el Sevilla de Helenio Herrera, el Sevilla de Juande Ramos o el Sevilla de Unai Emery. Cuadros para la historia con los que compite un equipo de realidad como el que ahora camina por LaLiga con paso de soldado pretoriano en las campañas romanas, y echándose, por qué no y mientras se pueda, en los oníricos brazos de Morfeo.
En términos más locales, lo peor que le puede pasar a un prioste de una hermandad contrastada es no saber qué inventar, porque entonces es cuando se equivoca. Eso le está sucediendo ahora a parte del sevillismo, que ante la incuestionable solvencia en los resultados, entra en el debate de si su equipo juega o no bien al fútbol, uno de los más antiguos desde que la humanidad es futbolera.
Y ahí entra la pregunta que abre este artículo. ¿Qué es jugar bien? Es importante definir este concepto. Hace unos años, el Sevilla y el Valencia CF empataban a cero en el Sánchez-Pizjuán. Si la memoria no me falla, creo que fue en 2008. La lectura posterior junto a un muy reconocido gestor del equipo nervionense es que aquel fue un muy buen partido de fútbol, con dos equipos que jugaron de poder a poder y en el que los engranajes defensivos se impusieron a las animosas y talentosas delanteras de ambos equipos.
¿Puede un 0-0 ser un gran partido de fútbol? Claro que sí. ¿Puede un equipo que gana casi siempre por la mínima jugar bien? El ejemplo está en Nervión. El Sevilla es una verdadera sinfonía defensiva de quilates, exornada con detalles en la vanguardia que le dan de sobra para ganar, la única verdad del fútbol. Produce auténtico placer ver a este equipo plantado sobre el césped y ejecutando a la perfección el plan de Lopetegui. ¡Que se acuesten los que dicen que no juega a nada! Juega exactamente a lo que quiere jugar, esto es lo que le da resultado, y no caer en la novelería de lo supuestamente estético es su mayor éxito. Una cosa es lo bonito y otra cosa es lo bueno.
¿Puede un 0-0 ser un gran partido de fútbol? Claro que sí. ¿Puede un equipo que gana casi siempre por la mínima jugar bien? El ejemplo está en Nervión. Produce auténtico placer ver a este equipo plantado sobre el césped y ejecutando a la perfección el plan de Lopetegui
¿Es vistoso el juego del Sevilla? Depende de para quien. Desde luego, no es el 6-4 al Espanyol en el primer partido de Jorge Sampaoli, ni es el Barça de Guardiola al que tantos quisieron imitar poniéndose un disfraz falso de cuatro euros y medio y ninguna posibilidad de éxito.
El Sevilla FC, tan dado a implantar acciones de marketing para su merchandising, haría bien en poner a la venta las camisetas de sus porteros después de cada partido. No tendrán mancha de verdina alguna y apenas olerán a sudor. Si eso no es jugar bien al fútbol…
El Sevilla haría bien en poner a la venta las camisetas de sus porteros después de cada partido. No tendrán mancha de verdina alguna y apenas olerán a sudor. Si eso no es jugar bien al fútbol…
Ganar, ganar y volver a ganar.....a ver si nos dejamos ya de tantas tonterías
Si señor,Gran artículo basilio . Pues según muchos compañeros tuyos de profesión ,el Sevillafc aburre ,es malo ,no llega ,no va a pelear la liga ,el entrenador es amarrategui y blablabla . Lo ke si está claro es ke este Sevillafc es una MAKINA de ganar y ganar y ganar ,por lo civil o lo criminal ,pero gana y ganar te da puntos y confianza ,en eso estamos y seguiremos haciendo . Saludos desde lo más alto de la liga
Echamos a Jimenez cuando íbamos terceros. Todavía nos podemos superar...
Amén
Cierto, no bonito, pero sí práctico y efectivo. Lo malo de eso es que lo hace siempre en el filo de la navaja y el 80% de los partidos los termina con fatiguitas y a pelotazos, como los mediocres. Parecido lo hizo el At. de Madrid los dos o tres últimos años y daba asco, tampoco es que le diera para mucho más, unao dos ligas , una copa y poquito más -que ya lo quisiera yo para mi sevilla- porque en Europa no dio nunca pie con bola. Cuando se juega bonito (y bien) se ganan los tripletes, los cuatripltes y todo lo que se ponga por delante. Dirán que la diferencia del potencial ecónomico no da para mucho más. Y yo recordaría a aquel DEPOR de dos reales hecho de retales que ganó dos ligas jugando de ensueño. Aunque para gustos, ya se sabe...