Mendilibar vs Mourinho: una batalla táctica con un respeto enorme
El día ha llegado. El Sevilla se enfrenta este miércoles a la Roma en la final de la Europa League con un título en juego... y una plaza para jugar en la Champions League el próximo año. En el césped, Mourinho, el hombre de las finales de Europa, contra Mendilibar, el novato en la élite: una batalla táctica con un respeto enorme.
Los que juegan estarán en el césped, sí, pero los que los eligirán estarán en los banquillos. En los últimos días, Mendilibar ha mostrado su admiración por el portugués y el ex del Real Madrid no ha dudado en admitir el respeto que le guarda tras lo realizado durante su carrera. En los micrófonos, respeto máximo.
Dos estilos diferenciados, dos equipos diferentes
Si nos parásemos a mirar el estilo de ambos entrenadores, como ellos mismos han reconocido, guardan algunas semejanzas... aunque con dos equipos muy diferentes.
El de Zaldívar plantea 4-2-3-1 sobre el terreno de juego, mientras que el luso apuesta por tres centrales con un 3-5-2, teniendo a un fijo en el ataque como es Tammy Abraham.
El cuadro romano apuesta por Roger Ibáñez, Mancini y Kumbulla o Smalling en la zaga, aunque el albanés es seria duda para la final. No obstante, también suele apostar por Cristante en defensa tras la irrupción del joven Edoardo Bove. En los carriles, Spinazzola, por la izquierda, y Zalewski o Çelik, por la derecha. En medio, Matić y Cristante, en la mediapunta, Lorenzo Pellegrini. En ataque, el inglés Abraham es fijo para Mourinho. Sin embargo, la duda está en si el portugués arriesgará con Dybala, ya que ha disputado 30 minutos en el último mes, o Andrea Bellotti para acompañar al ex del Chelsea.
En las semifinales entre la Roma y el Bayer Leverkusen, el conjunto italiano fue muy criticado en la vuelta por su forma de juego destructiva aguantando esa ventaja de 1-0 cosechado en el Olímpico de Roma. En Alemania, el equipo dirigido por Xabi Alonso dominó de principio a fin el partido, sin embargo, la fortaleza defensiva de los romanistas salió victoriosa.
Para la final se espera a un Sevilla que lleve la iniciativa y que domine la posesión. Tiene una plantilla con mucha calidad y debe ser capaz de dominar el centro del campo. En cuanto a la Roma, se espera que Mourinho plantee un juego más defensivo a la espera de cualquier espacio que se genere en defensa y en busca de Tammy Abraham (1,90 metros de altura) por arriba para que sea capaz de generar peligro. Atrás cuenta con tres jugadores corpulentos y con buen juego aéreo. El peligro con el que debe contar el cuadro de Mendilibar es el del marcador, ya que si se adelantan los italianos, buscarán mantener a toda costa el resultado.