Licencia para soñar
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Guerrero entró desde el banquillo y fue sustituido a los 15 minutos
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Declaraciones de Abelardo
'La Mareona' se merecía un partido como el que se vivió en Ponferrada. Más de 1.500 sportinguistas se desplazaron a El Tolarín en un fin de semana marcado por el temporal que ha llenado de nieve el norte del país. El Sporting de Gijón se supo amoldar mejor a las condiciones en las que se encontraba el terreno de juego y desde el primer minuto manejó el partido a su antojo.
Este equipo, castigado sin poder fichar por la nefasta gestión de los dirigentes, sigue creciendo jornada tras jornada. La dificultad de este choque era extrema por diversos motivos, el primero de ellos porque hasta la fecha ningún equipo había sido capaz de llevarse los tres puntos de Ponferrada y el segundo porque el duelo era entre dos conjuntos que por el momento están luchan por estar en la zona alta de la clasificación.
La apuesta de Abelardo fue la de dejar en el banquillo tanto a Guerrero como a Carlos Castro, por lo que en la alineación inicial no se encontraba ninguno de los dos delanteros específicos con los que cuenta el técnico a sus órdenes. La idea de 'El Pitu' salió a la perfección porque el control del esférico fue para los visitantes y la Ponferradina solo pudo llevar peligro a la portería de Cuéllar a la media hora del choque. El guardameta respondió con dos excelsas intervenciones que salvaron a los rojiblancos de encajar un gol.
El primer tanto del Sporting llegó tras un centro a la frontal del área de Carmona, Nacho Cases aprovechó la asistencia para golpear el balón sin dejarlo botar. El zurdazo se coló por el palo izquierdo de la portería de Kepa que no pudo hacer nada ante el remate del centrocampista. Con la ventaja de los rojiblancos en el marcador se llegó al descanso.
En cuanto el colegiado dio su aprobación para que comenzara la segunda mitad, los hombres de Abelardo fueron decididos a por el segundo gol. El segundo gol del Sporting no se hizo de rogar e Isma López volvió a firmar un tanto con la elástica rojiblanca. Una gran acción del navarro sirvió para abrir brecha en el luminoso. El extremo, reconvertido en lateral, volvió a dejar claro que quiere jugar en cualquier posición y que junto a Jony hacen una banda izquierda temible. Isma recogió el balón en la frontal y tras driblar a un adversario colocó el esférico con mucho mimo en la escuadra.
A partir de entonces el Sporting simplemente manejó el tiempo del choque y supo llevar la ventaja a buen puerto. La anécdota del encuentro fue la sustitución de Guerrero cuando apenas llevaba 15 minutos sobre el campo.
El choque terminó como suelen finalizar los partidos del Sporting, con una ovación a los artistas de la pelota. Una muestra más de cariño, orgullo y felicidad de una afición que se ve representada por sus futbolistas cada fin de semana.
Los tres puntos regresan a Gijón y con ellos el conjunto gijonés suma 44 puntos en los 23 partidos que se han disputado. Aunque el mensaje de Abelardo y del vestuario rojiblanco no sea otro que el de conseguir la permanencia, este equipo ha conseguido la licencia para soñar. Cualquier cosa puede pasar con 'los guajes' sobre el terreno de juego.