Isco evita el subidón

El Sporting ha caído con honores ante el Real Madrid, en un partido vistoso y épico por parte de los rojiblancos, que no merecieron perder. El Sporting se adelantó hasta dos veces en el marcador, pero un gol de Isco en el minuto 89 hizo que el fútbol fuera otra vez injusto. O como mínimo muy amargo para el conjunto gijonés.  

Con cinco defensas y Carmona de segundo punta por detrás de Duje Cop. Así salió el Sporting para plantar cara al Real Madrid, con esos pequeños retoques que había anunciado Rubi en la previa. La apuesta fue buena, muy buena. Ante un Madrid sin sus mayores estrellas pero con jugadores de mucho nivel. 
La primera opción de ataque fue rojiblanca. Moi vio a Cop en el palo largo de Casilla, remató pero se le fue desviado. Respondió el Madrid muy pronto, con una jugada muy similar aunque algo más clara para hacer el primero. El remate de Lucas Vázquez se fue desviado. 
El Sporting buscaba su opción al contragolpe o en una acción sorpresa como la del 1-0. Sacó Cuéllar en corto, Isma condujo y condujo el balón, se la dio a Vesga, que con un exquisito pase picado dejó solo a Cop ante Casilla. El croata se desmarcó muy bien y definió mejor para hacer el 1-0 en el minuto 13. Delirio absoluto en El Molinón. 
Pero la alegría duró poco, muy poco. Sobre todo porque Isco se empeñó en demostrar su tremenda calidad. Recibió en el área, se fue de Vesga y ante Amorebieta puso el balón en la escuadra derecha de Cuéllar. Imparable. El tanto, en cambio, no amedrentó al conjunto gijonés, que resistió sin problemas a la espera del contragolpe. De esta forma se llegó al descanso, con un meritorio Sporting y el Madrid más gris.
En la reanudación, sin cambios, el Sporting se llevó un buen susto nada más empezar. Tras una falta lateral innecesaria que Nacho remató para que Cuéllar salvara el 1-2. Perdonó el Madrid y, curiosamente, no lo hicieron los rojiblancos. Y precisamente tras aprovechar una jugada de estrategia, uno de sus tantos puntos débiles esta temporada. La puso Carmona, Babin prolongó y Vesga conectó el cabezazo de su vida. Y el de El Molinón este curso, que volvió a llevarse una gran alegría.
Merecía eso, disfrutarlo más y sufrir, pero otra vez llegó el empate. En un centro de Danilo que Morato convirtió en gol, superando a Babin en el salto. Y como en la primera parte el Sporting encajó el golpe como nunca. Se fue al ataque, tanto que incluso Rubi adelantó la posición de Isma López cuando la posesión era de los rojiblancos. En una de sus intentonas, el navarro se hizo un hueco en el centro y a punto estuvo de sorprender a Casilla con un disparo cruzado que se fue desviado por muy poco. Eran los mejores minutos de El Molinón esta temporada. 
Zidane se puso nervioso, no era para menos, por lo que buscó a Marcelo en el banquillo y también a Mariano. Un disparo del primero de ellos, después de otra gran jugada de Isco, pudo ser el 2-3 si el balón no se hubiese ido desviado rozando el palo izquierdo de Cuéllar. Restaban 20 minutos y cuando apenas faltaban 10 el técnico dio entrada a Ndi, por Cop, renunciando a la referencia ofensiva. Antes había entrada Nacho Cases por Moi Gómez. 
Los instantes finales fueron de sufrimiento, el mejor de los sufrimientos si Isco no lo hubiese impedido. Pero el mejor del partido dejó sin premio al Sporting con el 2-3 en el 89, de un disparo desde la frontal del área. Demasiado premio para el Madrid y el fútbol, otra vez, que fue injusto con los de Rubi. 

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