El Molinón aguanta el tipo
La temporada del Sporting de Gijón ha dejado mucho que desear. El cuadro rojiblanco no ha tenido continuidad, ha acusado la falta de gol y ha dejado que El Molinón - Enrique Castro Quini se convierta en un estadio vulnerable. Los datos lo demuestran. Pero, a pesar de que los resultados no hayan sido los mejores como locales, las cifras de asistencia vuelven a colocar a la afición rojiblanca como una de las mejores de la Liga 1|2|3.
Tras la disputa de todas las jornadas, El Molinón se sitúa como el segundo estadio de toda la competición con mayor número de afluencia. Únicamente, La Romareda supera al feudo gijonés. En cifras, el estadio zaragocista concentró en total a 408.639 espectadores. Por su parte, El Molinón sumó 380.007 personas en las jornadas en las que el Sporting disputó sus partidos como local.
A pesar de ser la mejor segunda cifra de Segunda, el Sporting ha sufrido una bajada con respecto a la temporada pasada. Y es que el año anterior, el estadio rojiblanco era el primer colocado a nivel de afluencia. La cifra del año pasado fue 430.256 espectadores, unos 50.000 aficionados menos. La mala dinámica del equipo fue uno de los detonantes de este bajón. Como muestra, el último partido de liga frente al Cádiz. 8.602 fue el número de aficionados que acudieron a El Molinón a presenciar el partido de su equipo, ya sin nada en juego.
Hacer de El Molinón un nuevo fortín debe ser una de las claves para la próxima temporada. José Alberto es consciente de ello. Y Miguel Torrecilla también. Por ello, uno de los principales objetivos es dotar a la plantilla de valores que identifiquen a la afición. Jugadores capaces de cautivar a la Mareona y volver a aumentar la cifra de afluencia. Con El Molinón encendido, el Sporting ganaría enteros para todo.