El Comité de Competición rechaza las alegaciones del Sporting por Rubén Yáñez y tiene sanción

El Sporting de Gijón vivió el pasado domingo un partido para olvidar. "Una película de terror", como definió el propio Rubén Albés en rueda de prensa, que se alarga a este fin de semana ya que el Comité de Competición de la RFEF ha decidido desestimar las alegaciones del club por la expulsión de Rubén Yáñez. 

Tras el más que polémico arbitraje de Muresan Muresan, que acabó expulsando al meta sportinguista, el club decidió presentar alegaciones al entender que se produjo una negligencia al acudir al monitor para revisar una cartulina amarilla, la segunda para el guardameta rojiblanco.

Rubén Yáñez fue expulsado con segunda amarilla en una jugada en la que Muresan Muresan no entendió inicialmente que hubiera infracción, pero tras ser llamado al monitor a revisar la acción, el colegiado rumano decidió señalar penalti del guardameta sobre Higinio.

El Sporting recurre por revisar una amarilla en el VAR

El origen de la reclamación viene con lo que ocurrió posteriormente. Tras un minuto de conversación con Caparrós Hernández, árbitro de VAR en el partido, Muresan acudió de nuevo al monitor, repasó la jugada y admitió que si pitaba penalti debía sacar la amarilla, una decisión que no está contemplada en los supuestos de intervención que marca el protocolo VAR, según mantiene el Sporting en su recurso.

El club también revisó la roja directa a Róber Pier, cuando en el minuto 14 el central derribó a Martón siendo el último defensa. Muresan, de nuevo, cambió su decisión inicial al acudir al monitor, pero por la redacción del acta, el Sporting entendió que no cabe reclamación alguna que pudiera prosperar para evitar la sanción de su central.

Aun así, como recordó el técnico Rubén Albés en la rueda de prensa posterior al partido, la acción recordó a una jugada similar, pero en sentido contrario, que tuvo lugar en La Romareda ante el Zaragoza hace tres jornadas.