Rodrigo, el hijo que más preocupa a Nuno

Rodrigo Moreno no atraviesa su mejor momento. El delantero del Valencia CF acabó sustituido ante el Levante UD y, en un partido regular de los de Mestalla, volvió a ser de los menos entonados.

En los mentideros futbolísticos y en las tertulias deportivas, son varias las semanas que se lleva clamando a gritos por un banquillazo para el futbolista internacional. Sin embargo, contra viento y marea, y contra sus propias estadísticas, Nuno Espírito Santo lo ha mantenido en el once. No en vano, los datos del futbolista nacido en Río de Janeiro son escalofriantes. En diez partidos sólo ha marcado un gol, y de penalti, ha sido expulsado en una ocasión y ha visto tres tarjetas amarillas.
Si por algo ha destacado Nuno desde que llegó a Valencia es por su vertiente psicológica. El técnico sabe cuidar a los suyos y el caso de Rodrigo es uno de los que más le preocupa. Quizá por ello, en el primer entrenamiento de la semana, el entrenador portugués le dedicó unos minutos de la charla a él. Rodrigo lleva cuatro partidos desaparecido y es el momento de recuperarlo para la causa. 
Para Nuno, la principal obsesión es que Rodrigo se olvide precisamente del entorno. Es un futbolista, reconocido por el técnico, que debe limpiar su mente. El entrenador portugués confía ciegamente en su fútbol pero sabe que, o se aísla de todo lo que le rodea, o será imposible que triunfe. Nuno ha hecho todo lo humana y deportivamente posible para que Rodrigo triunfe, ahora falta que él dé mucho más.
Ante el Barcelona, el entrenador valencianista tiene ante sí un test difícil. El punta hispano brasileño es imprescindible en su once, pero en su estado, y ante la presión externa, podría dejar su sitio en el equipo, si Nuno opta por dos puntas, y más teniendo en cuenta que Negredo ya está recuperado y que Alcácer está apurando los plazos para volver a la convocatoria contra el Barcelona tras regresar lesionado de su partido con la Selección. Si por el contrario, jugara con un único delantero, tampoco hay que olvidar que el centrocampsita Rodrigo de Paul llama a la puerta del once titular cada vez que salta al campo.