Con el cuchillo entre los dientes para Cornellà

Nuno Espírito Santo quiere adelantar la línea de presión ante el Espanyol en Cornellà. El técnico valencianista ha estado especialmente insistente en la sesión de entrenamiento matinal.

El técnico portugués ha dividido el campo en ocho "cuadrantes" para delimitar las zonas de presión, en especial en la zona de tres cuartos de campo. Esto es, para solucionar los problemas del equipo fuera de casa, el máximo responsable deportivo considera que la clave es dificultar la salida del balón de los rivales desde la linea de ataque. La idea es que los delanteros sean los primeros defensas.
El objetivo es recuperar el balón más cerca del área rival y conseguir que el equipo no esté tan atrás. Nuno quiere evitar las conducciones de balón largas y creaba poco peligro. Además, Nuno quiere completar esta presión, encerrando a los laterales rivales. Recuperar en banda y cerca de la portería contraria generará más ocasiones de gol y más claras. De esta forma, cuando el equipo recupere tendrá cinco o seis efectivos en zona de ataque y no uno o dos como sucedió, por ejemplo, en el partido disputado en La Rosaledao o en Balaídos.

Un posible once

Al tiempo, Nuno ha ensayado con un posible once titular para jugar en el Powe8 stadium. Ante la ausencia de Otamendi, por delante de Diego Alves estarían, Barragán -que vuelve al once- Mustafi, Vezo y Gayà. En el medio es donde más dudas tiene Nuno Espirito Santo, ya que podría hacer descansar a Parejo (que ha estado trabajando a menor ritmo esta semana), por lo que podría meter a tres mediocentros con Javi Fuego, Enzo Pérez y André Gomes, mientras que en las bandas a regresarían Feghouli mientras que Rodrigo Moreno y Piatti se juegan un puesto en el once; en la punta del ataque estaría Paco Alcácer. Aunque Nuno probó situaciones de partido y también probó en el entrenamiento a la dupla Alcácer y Negredo, con lo que acabaría jugando con dos mediocentros: un 4-4-2 y por momentos un 4-2-3-1.