La noche en la que los Murciélagos tutearon a los Diablos Rojos

El Valencia CF sacó un merecidísimo empate ante el Manchester United en Old Trafford. Los valencianistas fueron mejores, tuvieron más ocasiones y tutearon a los Diablos Rojos en su propio infierno. Con todo, si por algo pasará a la historia este Manchester Valencia es por la generosidad defensiva de los valencianistas que se desfondaron para sumar su primer punto en la presente Champions.

El partido, que empezó cinco minutos tarde por el retraso del Manchester a la hora de llegar al estadio, no decepcionó por su grandilocuencia. El escenario lo merecía y el Valencia, de blanco 'centenario' se apostó en defensa, dispuesto a sufrir y a salir a la contra para tratar de sorprender al Manchester.

El tercer mediocentro, Francis Coquelin, le daba un empaque al doble pivote formado por Kondogbia y Parejo que permitía a Guedes, Rodrigo y Batshuayi salir con velocidad en pos de la meta contraria.

Así, Guedes, tras una buena jugada de todo el frente de ataque valencianista, probó fortuna en el 11. De Gea, bien colocado, embolsó la pelota. La respuesta inglesa fue cazar al internacional portugués. Slavko Vincic no vio nada. Ni siquiera amonestó a Antonio Valencia; pero sí a Coquelin poco después.

Por fortuna Antonio Valencia no sacó del duelo a Guedes que, poco después, volvería a burlarse de su marcador. Su centro, eso sí, no encontró a Batshuayi, este martes compañero de Rodrigo en ataque. El Valencia, muy serio en defensa, se marchó al descanso sin pasar demasiados apuros y dejando la sensación de que, a poco que la fortuna le hubiera acompañado, habría conseguido un mejor botín.

El Valencia, muy serio en defensa, se marchó al descanso sin pasar apuros y dejando la sensación de que, a poco que la fortuna le hubiera acompañado, habría conseguido un mejor botín.

El Valencia comenzó la segunda mitad como acabó la primera: atacando. Guedes, tras pase de Rodrigo, chutó colocado, pero muy desviado.

El Valencia tuvo infinidad de ocasiones para marcar

El Manchester, a balón parado, trató de recuperar la manija de un partido que claramente estaba en manos valencianistas. Pogba, de falta directa, buscó la escuadra, pero Neto, bien colocado detuvo sin demasiados apuros y secó a los Red Devil que, poco después, castañetearían los dientes ante la ocasión de Basthuayi, muy clara, que mandó el balón a las nubes, o ante la contra de un Guedes que incomprensiblemente se dejó la bola atrás cuando sólo le quedaba encarar a De Gea.

El marcador inicial no se movería y, aunque el resultado final fue un empate, lo cierto es que, a los puntos, el Valencia fue mejor.

Fue el preludio del primer cambio. En el día de su cumpleaños, el delantero belga dejaba su puesto a Gameiro; poco después, un soberbio Coquelin hacía lo propio con Carlos Soler y Cheryshev cerraría el carrusel de cambios sentando a Guedes.   Nada iba a cambiar en el escenario. El Manchester apretaba y el Valencia golpeaba, sin tino, a la contra.

Con todo, la mejor ocasión del Manchester-Valencia sería para Rashford que estrelló el balón al larguero en una falta lateral. Fue la mejor ocasión de un Manchester que, sin embargo, no merecía la victoria y no marcó. De hecho, el marcador inicial no se movería y, aunque el resultado final fue un empate, lo cierto es que, a los puntos, el Valencia fue mejor. Los de Marcelino fueron protagonistas en una noche en la que los murciélagos tutearon a los Diablos Rojos en su propio infierno.