El Cheryshev más personal: "Si no fuera por mi padre me hubiera rendido bastante pronto"
Denis Cheryshev ha crecido con un modelo claro: su padre. Tanto que sin él puede que nunca habría logrado ser futbolista profesional. Dmitri Cheryshev fue el espejo en el que mirarse y su consejero para superar los momentos duros.
En este entrevista en exclusiva para ElDesmarque Valencia, Denis Cheryshev se sincera sobre su relación con su padre y los objetivos que se han marcado cuando termine su etapa en el Valencia CF.
¿Alguna vez has valorado jugar con la selección española?
No. Desde pequeño, con 15 años, me llamaron de Rusia. Yo estoy muy feliz de jugar con Rusia. Desde pequeño me he sentido ruso. Soy muy feliz de estar allí.
¿Naciste en Rusia, pero prácticamente te has criado en España, no?
Sí. Llegamos a Gijón con cinco años. Mi padre fichó por el Sporting y allí fue donde empecé a jugar un poco más en serio a fútbol.
Tu padre no pudo jugar un Mundial con Rusia, pero tú sí. ¿Cumpliste su sueño en la última Copa del Mundo, no?
Sí. Estuvo muy cerca de ir al Mundial del 94, pero no pudo ser. El año pasado se alegró muchísimo de todos los éxitos. Comentaba algún partido y se volvía loco. Es algo para recordar para siempre.
Vemos mucho a tu padre por Paterna. ¿Tiene buena relación con Marcelino? ¿Se conocían de Gijón?
Cuando mi padre jugaba en el Sporting, el míster estaba en el B. Se conocían y tienen buena relación. Además, es entrenador en la segunda división rusa y le gusta aprender y ver los entrenamientos. Siempre que puede se acerca a verme y a ver los entrenamientos.
¿Por lo que dices, tu padre tiene una importancia vital en tu carrera, no?
Vital. Gracias a él he llegado a ser futbolista de primera división y a creer más en mis posibilidades. Si no hubiera estado él creo que me hubiera rendido bastante pronto.
¿Alguna vez has estado cerca de tirar la toalla?
No. Para nada. Pero de pequeño hay situaciones en las que no juegas y me ha servido para hacerme más duro de carácter. Si te ponen las cosas fáciles te relajas y yo por suerte o por desgracia no las tuve fácil. Gracias a Dios me ha ido bien.
¿Te imaginas que te entrena en algún equipo?
Nunca digas nunca. Nosotros tenemos en la cabeza poder entrar a algún equipo juntos en un futuro lejano.
¿Te ves como entrenador?
Sí. Creo que podría echar una mano a mi padre.