El Valencia CF recupera la confianza y la seriedad
El Valencia CF ha recuperado la confianza perdida. La victoria contra el Real Betis (2-1) permite a los de Mestalla coger aire después de mala dinámica de resultados en la que se había enredado. En definitiva, el Valencia-Betis no fue un partido brillante para los de Celades, pero sí estuvieron muy serios y competitivos para sumar tres puntos que les enganchan de nuevo a la pelea por los puestos de Champions League.
Albert Celades apostó de inicio por un once formado por Cillessen; Wass, Diakhaby, Gabriel Paulista, Gayà; Ferran, Parejo, Kondogbia, Soler; Gameiro y Maxi Gómez. Se posicionaron sobre el césped con un claro 4-4-2 en el que, como es habitual, Soler partía en banda izquierda, pero buscaba posiciones centrales para ayudar en la construcción del juego. Con independencia de los regresos de Gabriel Paulista, Gayà o Maxi Gómez, la gran novedad de la alineación fue la reaparición de Jasper Cillessen. El holandés recuperó la titularidad después no ser de la partida desde el pasado 7 de diciembre.
El plan inicial del Valencia CF fue ir por el Betis, buscando recuperar el balón lo más cerca posible del área rival. Realizó una presión elevada, con la defensa muy adelantaba, reduciendo al máximo los espacios para la circulación del balón de los verdiblancos. Como consecuencia de ello, los de Rubi, que saltaron al césped con tres centrales, tuvieron serios problemas para profundizar.
La apuesta funcionó bien de inicio, pero con el paso de los minutos el Betis fue descifrando la manera de hacer daño al Valencia CF y se sintió cada vez más cómodo en Mestalla. Poco a poco los verdiblancos fueron creciendo y a partir del minuto 25 se adueñaron del partido. Tanto es así que los béticos acabaron la primera parte con un 64% de posesión y acercándose con frecuencia a las inmediaciones del área de Cillessen. Los de Celades tenían problemas para hacerse con el balón y sus escasas opciones de generar peligro pasaban por contragolpes esporádicos.
Gameiro cambia el partido
En la segunda parte, el Betis salió mucho más enchufado, haciendo daño al Valencia CF desde el primer minuto. De hecho, en apenas cinco minutos Fekir ya había estrellado un balón contra el travesaño. Celades buscó soluciones en el banquillo. Guedes entró en lugar del lesionado Maxi Gómez, pero no se situó como punta, sino en banda izquierda. Fue Carlos Soler quien ocupó el centro, haciendo de enganche.
Las sensaciones no era buenas, pero Kevin Gameiro lo cambió todo con un potente disparo desde la frontal. Recibió un pase de Guedes desde la izquierda y no se lo pensó dos veces. Soltó un zapatazo que acabó en el fondo de la portería tras rebotar contra la madera. El gol devolvió la confianza al Valencia CF.
Rubi buscó la reacción de su equipo cambiando el esquema a un 4-3-3 con las entradas de Aleña y Tello. Pese a las intenciones verdiblancas, el Valencia CF mandó el partido a la nevera. Contemporizó con el balón, moviéndolo con calma, silenciando así el toque de corneta de los béticos. La puntilla llegó de los pies de Parejo. El de Coslada congeló el tiempo dentro del área para hacer el definitivo 2-0 y atar los tres puntos para los de Mestalla. Loren hizo el 2-1 en el descuento, pero el partido ya estaba decidido.
En definitiva, el Valencia-Betis devuelve la sonrisa a un equipo que comenzaba a dudar de sí mismo. Los tres puntos son importantes, pero más todavía recuperar una confianza que parecía perdida.
