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Más allá de la crisis deportiva e institucional que sufre el Valencia en estos momentos, este martes 30 de junio es un momento complicado para los valencianistas. La etapa de Ezequiel Garay como blanquinegro llega a su fin y lo hace de la peor manera posible. Con el jugador lesionado, con el club dándole la espalda, sin honores y marchándose por la puerta de atrás. Flaco favor el que se hace la entidad a sí misma al dejar escapar al mejor defensor que ha tenido durante los últimos tiempos.
La relación entre el jugador y el club se fue resquebrajando a lo largo de toda esta inestable temporada hasta el punto de llegar a un enfrentamiento público que significó un punto de no retorno y ponía en marcha la cuenta atrás hasta la marcha definitiva del central argentino.
El no entendimiento entre ambas partes para prolongar el contrato de Garay fue creciendo hasta el día en que Garay salió públicamente a denunciar, según sus propias palabras, "la campaña de desprestigio en contra de su persona por parte de algunos gestores del club". Garay cargó contra los responsables valencianistas, asumiendo ya su marcha.
Para justificar su decisión, el club aprovecha la mala fortuna del jugador, que sufrió en febrero una grave lesión de rodilla y de la que a día de hoy todavía se recupera. Esa situación y su edad, 33 años, llenan de incertidumbre el futuro del futbolista, que abandona a coste cero la disciplina valencianista y llegará de la misma forma a su nuevo equipo, sea cual sea.
Los números de Garay en el Valencia
Punto y final a la etapa de Ezequiel Garay en el Valencia CF después de cuatro temporadas en las que disputó un total de 114 partidos oficiales, 92 de LaLiga, 8 de Copa del Rey, 8 de Champions League, 5 de Europa League y 1 de Supercopa de España.
Firmó un total de 6 goles y recobró su mejor nivel de la mano de Marcelino García Toral.