El mensaje de Tendillo y Bossio para la plantilla del Valencia CF

Miguel Tendillo y Miguel Ángel Bossio, embajadores y leyendas del Valencia CF han analizado la crisis deportiva y social que atraviesa la entidad y han propuesto su remedio para poder salir de la situación en la que se encuentra el equipo tras tres derrotas consecutivas en LaLiga Santander. "La mejor medicina es la de ganar, pero para ganar hay que pelear desde el primer minuto hasta el 90", explican. 

"La afición siempre ha estado con nosotros. Lo demostraba cuando yo vestía esta camiseta y también ahora. Tenemos que pensar que los jugadores que tenemos actualmente son los mejores para nosotros y para la afición”, cuenta Miguel Tendillo. "No tengo ninguna duda de que ellos quieren. Otra cosa es que no le estén saliendo bien las cosas, pero quieren estar a tope desde el primer minuto hasta el noventa. Deben tener la confianza de saber que si ellos están en el Valencia CF es por sus méritos y buscar entre todos formar una piña", agrega el exjugador campeón de Copa, Recopa y Supercopa, en declaraciones a VCFMedia

Tendillo: "No tengo ninguna duda de que ellos quieren. Otra cosa es que no le estén saliendo bien las cosas, pero quieren estar a tope desde el primer minuto hasta el noventa".

Miguel Ángel Bossio, que recogió su testigo en el campo a mediados de los 80, da su particular versión del asunto. "Hay veces que circunstancialmente se dan cosas dentro del campo por las que dejas de jugar de la forma que habitualmente haces, hacerlo de forma efectiva. Es parte de tu vida como deportista, no siempre salen las cosas como uno quiere que salgan", indica.

"La solución es que hablen mucho dentro del campo. A veces un grito fuerte viene bien a un compañero. Si le sale mal una, que a la siguiente lo intente".

En ese sentido, recuerda que los jugadores deben ser comunicativos sobre el césped: “estamos a pie de campo y lo que tenemos que hacer es que a medida que subimos los escalones nos olvidamos de todo y nos compenetramos para ser un equipo con solidez y competitivo”. Para él la solución es que "hablen mucho dentro del campo. A veces un grito fuerte viene bien a un compañero. Si le sale mal una, que a la siguiente lo intente. Son aspectos fundamentales. Al menos así lo viví en mis tiempos. A veces un compañero sale más dormido que otro, y un compañero le pega un grito para ayudar a mejorar. Hay que aceptar las críticas y aceptar los alientos del grupo para unificar esfuerzos", concluye.