Las dos noches mágicas en el Benito Villamarín
El Benito Villamarín resuena en el imaginario colectivo valencianista como un escenario donde se hizo historia y se culminó un proyecto deportivo campeón que tras la gesta de la Copa del Centenario no ha hecho más que decrecer hasta sumir al actual Valencia CF en un lucha por la zona baja que no acostumbra durante su historia. En la visita de este domingo al estadio del Real Betis se disputa el partido correspondiente a la jornada 33 de LaLiga Santander, en la que jugarán los recuerdos de una generación entera de valencianistas. Y no solo por la final de Copa, las más recordada, sino también por aquella ida épica de semifinales. El elenco de Marcelino hizo historia en la 2018/19 y el Benito Villamarín fue uno de los lugares que se erigió como clave. En el recuerdo, aquel "soñar que no tenemos techo" que ya no tiene sentido ahora.
Desde ElDesmarque Valencia recordamos aquellos dos partidos que marcaron el devenir del Valencia CF en el año del Centenario.
Del drama a la euforia
Hacía apenas una semana que el Valencia CF había eliminado al Getafe de la Copa con esos dos goles en el descuento que hicieron estallar Mestalla. Era 7 de febrero y el Villamarín se vestía de gala para la ida de las semifinales. Loren anotó en el descuento de la primera mitad y en la reanudación lo hizo Joaquín, de gol olímpico.
Las esperanzas del conjunto blanquinegro se esfumaban con el paso de los minutos, pero la temporada del Centenario demostró que este equipo nunca se rinde. En el 70', anotó Cheryshev a pase de Gameiro; y en el descuento fue el francés el que empató con asistencia de Rodrigo. Los aficionados ché en el Villamarín no se lo podían creer. La vuelta en Mestalla la ganó el Valencia CF y se pudo cantar aquello de "illa, illa, illa, nos vamos a Sevilla".
Fin a una sequía de 11 años
Y tanto se cantó el "illa, illa, illa" que el 25 de mayo de 2019, un Valencia CF de 100 años y dos meses se disponía a conseguir ese título tan ansiado para poner el broche a la apoteósica temporada del Centenario.
La historia de aquel partido se cuenta sola: el fallo de Rodrigo nada más empezar, los goles de Gameiro y del hispanobrasileño, las paradas de Jaume, el palo de Messi, su gol posterior, el sufrimiento final, los fallos clamorosos de Guedes... Y el pitido final, que hizo llorar a millares de valencianistas y hacer estallar de júbilo a todas las almas que desde casa o desde el Villamarín apoyaban al equipo. Esta fue la historia de la Copa del Rey del Centenario, la de una generación entera.
