Si se puede definir al Valencia CF de Bordalás con una palabra esa sería seriedad. El equipo, en el primer partido de pretemporada dejó muestras del librillo que quiere el técnico imponer en el conjunto de Mestalla y le salió bien, incluso remontando ante un Villarreal que fue peor pero que tuvo más pegada en la primera hora de partido.
El choque, desde el once titular, hasta la actitud de todos los jugadores, dejó algunas muestras del librillo que el técnico quiere imponer el estilo de juego que le ha hecho conocido en LaLiga Santander con el Getafe y que le ha abierto las puertas de un grande como el Valencia CF. Intensidad, pelea, orden táctico y pocas concesiones defensivas -a pesar de encajar dos goles- son las señas de identidad de un técnico que tras una semana de trabajo dejó ya su impronta en el equipo. Ver pelear a sus pupilos hasta el minuto 90 y remontar es la entrega que la afición espera de su bloque y que Bordalás prometió cuando llegó y que exigió desde la banda durante todo el duelo. No dejó de hablar ni en las pausas de hidratación.
En ElDesmarque analizamos algunas pinceladas tácticas de lo que apunta el Valencia CF de Bordalás.
A pesar de jugar casi todo el partido con tres centrales en el campo, además de la dupla de zagueros el tercero en discordia estuvo siempre en la medular. Primero fue Hugo Guillamón y, en la segunda, hasta que se lesionó Piccini, fue Guillem Molina. es una prueba inequívoca que ahí faltan futbolistas. Lo dijo el propio Bordalás al acabar: "Faltan jugadores por llegar y jugadores que como sabéis están de vacaciones todavía, y con ganas de que se reincorporen con el grupo y seguir trabajando para el inicio del campeonato"
A pesar de los cambios y de que faltan jugadores, el equipo siempre formó con un 1-4-4-2 con dos extremos por banda (así nació el 3-2 con una llegada de Jason) un doble pivote muy defensivo y una línea defensiva que subía poco y no pasaba de la medular. Los laterales sí que doblaron varias veces a los interiores. Se espera el doble-lateral en muchas ocasiones.
Bordalás no quiere que nadie esté cómodo o relajado y prueba a jugadores "fuera de sitio". Yunus jugó de mediapunta para aprovechar su velocidad, Thierry Correia estuvo en la segunda mitad como lateral izquierdo, Guillem Molina de mediocentro como el ya mencionado Guillamón o Diego López en una banda y no en punta
Y falta si es preciso. El equipo presionó, a pesar de ser el primer partido de pretemporada, al Villarreal en todo el campo. Especialmente intensa era la presión tras pérdida. Así nacieron las mejores ocasiones y el gol de Vallejo, por ejemplo.
En apenas dos o tres toque el Valencia buscaba la portería rival. Pases largos, bien de Guillamón, Alderete o Racic y pases buscando la velocidad de Yunus fueron un recurso habitual. Lo importante: llegar rápido al campo contrario.