Y tras la victoria del Valencia, la protesta contra Peter Lim no cesa

Es una noche más de alivio que feliz para el Valencia CF. El equipo dirigido por Rubén Baraja ha vencido a la Real Sociedad (1-0) en un encuentro redondo para los intereses locales. Mestalla ha empujado como nunca para mantener la ventaja, aunque sin olvidar las protestas contra Lim. Se han producido antes del partido a las puertas del palco, y tras la victoria, varias decenas de aficionados han seguido cantando contra la propiedad y con una sonora pitada.

El día en el que el Valencia CF duerme fuera de la zona roja, las protestas contra el máximo accionista y contra la dirección no cesan. Se pretendía que el 25F fuera otro día de recuerdo por el valencianismo y, al menos, ha servido para no dejar atrás el 11F. Tras el partido han sido varios menos los que se han hecho de notar en la Avenida de Suecia, pero suficientes para dar un último grito y cerrar una noche de mínima tranquilidad en el entorno che.

Dentro y fuera de Mestalla, la afición estalla contra Lim

Como la policía decidió evitar el recibimiento por motivos de seguridad y desvió los autobuses, las protestas contra Peter Lim convocadas para las 20 horas comenzaron mucho antes. Hubo tiempo para manifestarse, pero a diferencia del 11F, este 25 de febrero cada valencianista ha entrado a Mestalla y está empujando al equipo para llevarse una victoria vital en la lucha por la permanencia. La llamada de Rubén Baraja, que volvía trece años después de su retirada, ha hecho mella: habrá tiempo para protestar -antes y después-, pero durante los 90 minutos el Valencia necesita tener un número 12.  p

El coliseo valencianista ha vuelto a rugir con el pitido inicial y ha vuelto a llenar la grada. Respecto al equipo, la afición se ha volcado con los once elegidos con Gattuso y está haciendo su papel en cada duelo del juego. No obstante, ha habido tiempo desde las propias localidades para la protesta contra Meriton y la cúpula dirigente del Valencia. En el minuto 19, se ha producido una sonora pitada que deja claro que una gran mayoría del valencianismo está harta de Peter Lim. Aunque para entonces, el Valencia ya había recibido la primera dosis de ánimo tras las dos llegadas por banda. Al acabar, se ha seguido el mismo patrón.

Pese a que los objetivos deportivos pasan por la permanencia, 37.465 espectadores se han dado cita en Mestalla.