Ana Pérez, una gimnasta primeriza que quiere volar alto en Río
La única representante femenina española de gimnasia artística en los Juegos de Río de Janeiro, Ana Pérez, es una joven sevillana de 18 años que se enfrenta por primera vez al gran reto de una cita olímpica con las expectativas de "colarse" en la final el próximo jueves.Alba Navas
Ana Pérez se ha sometido durante estas últimas semanas a unas sesiones de entrenamiento muy duras en las que su entrenadora ha sido "más exigente" que de costumbre porque la preparación es "muy minuciosa, pero debe serlo para unos Juegos Olímpicos", afirmó en una entrevista con Efe.
"Yo voy a luchar por entrar en la final, pero sobre todo voy a disfrutarlo porque puede que sea mi única oportunidad. En cuatro años pueden pasar muchas cosas", aseguró la gimnasta, consciente de que en el mundo del deporte la incertidumbre está a la orden del día.
Pérez se mostró segura y confiada en sí misma, sin preocuparse por si logra pasar o no a la fase final: "Si yo ejecuto mis ejercicios como yo sé y no me clasifico no será un fracaso, sólo significará que no he tenido un buen nivel para pasar", confesó.
Sabedora de su posición como principiante, Pérez no va a arriesgar demasiado y ha apostado por ejercicios que controla porque, según dijo, no se juega "ninguna medalla" ni aspira "a ningún puesto", sino que va a "disfrutar y a demostrar de lo que puedo ser capaz".
Ana Pérez es una chica humilde y no descarta a ninguna de las gimnastas contra las que competirá: "Todas se preparan muy bien y aprietan mucho en las últimas semanas".
El combinado nacional femenino no logró clasificarse para Río 2016 en el Mundial de Glasgow, lo que ha supuesto tres juegos consecutivos de ausencia.
Esta es quizás la 'espinita' que tiene la gimnasta, quien manifestó que no es que se sienta responsable, pero podría haber dado más de sí misma, ya que no estaba contenta con su nivel, aseguró con cierto tono de tristeza.
Para Pérez, uno de los principales problemas ha sido la tardanza de las becas ADO, ya que en dos años tuvieron que preparar todo, tanto individual como colectivamente.
"Es muy difícil crear un equipo de la nada, ha sido un ciclo complicado porque se ha tenido que hacer a contrarreloj", aseguró la andaluza.
"Esperamos que en los Juegos de Tokio 2020, con un rodaje de seis años, sí que podamos competir por equipos", afirmó optimista la gimnasta.
En unos Juegos Olímpicos no sólo es importante una buena preparación física y técnica, la mentalidad también juega un papel fundamental a la hora de encarar una cita deportiva de este nivel y, en este sentido, la gimnasta afirmó que ha estado trabajando con una psicóloga deportiva para "controlar la ansiedad, la autopresión, los nervios y la influencia de factores externos".
Lo que más le apasiona a esta joven sevillana de la gimnasia es tener la "sensación de volar", aunque para disfrutar de este momento tuvo que pagar un alto precio en forma de roturas continuas en los brazos.
"Era muy duro recuperarte y volver a lesionarte", aseveró Pérez, quien tuvo que estar alejada de la gimnasia durante un año pero se aplicó la filosofía de "curro, curro y más curro" para poder volver en plena forma.
La gimnasta andaluza tiene los pies en el suelo a pesar de que se pase la mayor parte del tiempo en el aire.
"¿Qué espero de mí misma?...Pues demostrarme todo lo que he trabajado, disfrutar de esta experiencia única. En un futuro estaría bien verme con un oro olímpico, pero es difícil. Yo seguiré trabajando duro como hasta ahora", apostilló.